Segovia se suma a la repulsa por la última víctima de violencia de género
La subdelegada del gobierno, Marian Rueda destaca la importancia del entorno y la sensación de acompañamiento a la víctima para hacer frente a la carga emocional de esta sobre el agresor y poder evitar homicidios como el de Arroyo de Cuéllar.
Segovia
A las doce del mediodía, en la escalinata de la Subdelegación del Gobierno de Segovia, ha tenido lugar un respetuoso minuto de silencio en solidaridad y como muestra de absoluta repulsa ante el asesinato Malinca, la joven de Cuellar de 33 años que fallecía ayer tras ser violentamente agredida por su expareja el domingo en la cercana localidad de Arroyo de Cuéllar. Es un dolor inmenso el que sufrimos como segovianos de una mujer joven que ha sido asesinada y no podemos más que decir basta ya a esta violencia que está machacando a la sociedad" ha expresado la subdelegada del Gobierno, Marian Rueda.
A pesar de que el agresor contaba con una orden de alejamiento, la subdelegada destacaba la importancia del entorno familiar. "Es muy importante en la protección porque muchas veces a las víctimas, por miedo y salvando una vergüenza muy importante hacen la denuncia, pero el vínculo y la carga emocional que tienen con el agresor nos tiene que hacer a todos estar alerta como sociedad, porque a veces ese quebrantamiento y distanciamiento obligatorios que tienen que tener los agresores sobres las victimas, se rompen. Estamos muy acostumbrados a ver eso, tenemos que intentar que se mantenga la prevención y el acompañamiento. Desde la denuncia lo hacemos y desde las disposiciones judiciales, pero como vemos en este caso a veces no es suficiente", explica Rueda. Además insiste que en este caso el agresor hizo un quebrantamiento y "a veces esa carga emocional hace que las víctimas, por el vínculo que todavía tienen con el agresor, no sean conscientes de ello. Por ello el entorno y la sensación de acompañamiento a la víctima es fundamental para no llegar a lamentar un homicidio como este", añade.
Asi mismo recuerda la importancia de denunciar ante cualquier atisbo de agresión y no ser cómplice. Con la víctima de Cuéllar se suma el número 38 de mujeres asesinadas a manos de su expareja en lo que va de año. La subdelegada también pone el foco en los niños uqe quedan huérfanos. "En este caso es una criatura de corta edad que la familia se va a hacer cargo para intentar regenera a esta persona que se ha quedado sin madre en estas circunstancias", indica.
En la actualidad, según los datos aportados por Marian Rueda, "en la provincia se mantienen abiertos 264 casos dentro del Sistema Viogén de los cuales 9 son de nivel alto o extremo que son las mayores protecciones como la tenía Malinca, e incluso a través de los sistemas Cometas (pulseras telemáticas para el agresor) se pone esa protección para que sea máxima. Es el 71% de los casos que tenemos en toda Segovia. Más de 350 casos que nos hacen estar alerta y que a veces empiezan con pequeños detalles".
Por otra parte ha insistido en la importancia de hacer frente a esta lacra, protegiendo y acompañando a las víctimas y ha destacado el papel de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, asi como las medidas que se tomas desde el Gobierno de España. "Tomamos todas las medidas para trabajar en la prevención y educación, con charlas educativas, formación a las personas que se encuentran en esta situación y especializando a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad para que esta sea la última víctima", ha explicado, a la par que recordaba lo dura y triste que ha sido la semana, lamentando las circunstancias y esperando que esta sea la última.
Segovia llevaba mas de cuatro años sin registrar una muerte por violencia de genero. La anterior victima mortal había sido Alina Erica en agosto de 2020. El acto solidario ha reunido representantes políticos de todas las instituciones entre las que ademas de la subdelegada del Gobierno se encontraban los alcaldes de Segovia y Cuéllar, el presidente de la Diputación y fuerzas de seguridad de Segovia, capital y provincia.