Ley de Violencia de Género de Castilla y León: Una década para actualizar una ley

Valladolid

Rigor. Esa es la excusa de la Junta de Castilla y León para la actualización de una ley que lleva 10 años de demora. Estamos hablando de la Ley de Violencia de Género de Castilla y León, aprobada en 2003, la propia consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, admitió en su día que se trataba de una ley obsoleta, ya que su referente a nivel nacional data de 2007.

El trabajo para desarrollar esta actualización comenzó a elaborarse no en la legislatura pasada, donde el equipo de gobierno lo formaban el Partido Popular y Ciudadanos, sino en la anterior, la última de Juan Vicente Herrera al frente del gobierno autonómico. Entonces se convocó a decenas de colectivos en las Cortes de Castilla y León para tomar nota de sus sugerencias y estimaciones sobre lo que debería ser la nueva norma, pero ese trabajo nunca cristalizó en un texto, a pesar del esfuerzo de los grupos parlamentarios -unos más que otros- por elaborar las conclusiones en las que debería basarse el nuevo texto.

Isabel Blanco ha defendido que, 10 años después, continúan trabajando en ello y el único resquicio que deja a la esperanza de que por fin esta actualización vea la luz es la nueva situación del ejecutivo, es decir, la salida del partido de ultraderecha Vox.

Ya en junio del año pasado, desde la Coordinadora de Mujeres de Valladolid, Yolanda Martín, su portavoz, aseguraba que "la actualización de la ley se hizo en el marco del Diálogo Social, y también fue una actualización de ley refrendada por gran parte del movimiento feminista. Creemos que no está entre sus intenciones sacarla adelante". Culpaban a sus exsocios de gobierno, que ahora verán esta actualización y algunas de las leyes que propusieron cuando estaban en el poder, como la de Violencia Intrafamiliar, desde la oposición.

Centros de Atención a Víctimas de Agresiones Sexuales en Castilla y León

La consejera daba estas declaraciones en la presentación de los 9 locales en los que se ubicarán los Centros de Atención a Víctimas de Agresiones Sexuales en Castilla y León. Ávila y Palencia eran las provincias que más retraso llevaban en la adquisición de los locales, que recordemos que deberían estar funcionando desde el año pasado.

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Con las instalaciones ya sobre la mesa, parece posible que estén en funcionamiento antes del 31 de diciembre, ya que de no estar listas para esa fecha, tocaría devolver el dinero que el Gobierno ha enviado a la Junta para su puesta en marcha, puesto que proviene de Fondos Europeos.

Los locales cuentan con entre 2 y tres despachos, 1 sala de reuniones,1 sala de espera,1 espacio de almacenamiento y dos aseos, de los cuales, al menos uno de ellos debe ser accesible. Isabel Blanco, confía en su puesta en marcha y asegura que el proyecto complementario que desarrollaron, el centro virtual ATIENDO, cuya finalidad es que la tención también llegue a las zonas rurales, está funcionando y piensan en ampliarlo.