Detenido en Valladolid por facilitar el 'ciberacoso' a una amiga de su ex pareja

Valladolid

La Policía Nacional ha detenido en Valladolid a un varón como presunto autor de un delito de acoso contra la libertad de las personas, tras "perseguir" a una persona mediante llamadas telefónicas y a través de internet. Según han explicado fuentes de la Subdelegación del Gobierno, a finales de 2023 se recibían dos denuncias en dependencias de Policía Nacional. En ellas, una persona declaraba el "acoso insistente y reiterado" que sufría después de que "alguien" hubiera creado un perfil falso en una conocida red social.

Además, según han explicado las mismas fuentes, también se creó una dirección de correo electrónico con los datos y la fotografía de la denunciante. La víctima relataba el acoso sufrido mediante llamadas de teléfono, algunas de ellas de manera anónima a su dispositivo móvil y varias de ellas a "horas intempestivas". A partir de ese momento, su puso en marcha la correspondiente investigación por parte del Grupo de Ciberdelincuencia - Investigación Tecnológica para conseguir el total esclarecimiento de los hechos.

La misma persona era la responsable

Del análisis de la información obtenida y de las gestiones practicadas, se pudo demostrar que detrás de todos los hechos se encontraba la misma persona. El 'modus operandi' del acosador consistía en molestar a la amiga de su ex pareja sentimental. Y el punto de origen de todo fue la separación de ambos. Por todo ello se procedió́ a la localización y detención del acosador por un delito de acoso contra la libertad de las personas. Fue puesto a disposición judicial, declaró en el Juzgado de Instrucción 1 de Valladolid, en funciones de guardia, que decretó su puesta en libertad con cargos.

Desde el Grupo de Ciberdelicuencia-Investigación Tecnológica han insistido en la responsabilidad penal que se deriva del acoso insistente y reiterado, al crear perfiles falsos, introducir anuncios en páginas de contactos y realizar llamadas de manera a conocidos a través de las nuevas tecnologías. Estos hechos acarrean penas de prisión de tres meses a dos años y multa de seis a veinticuatro meses por el nuevo delito también como conocido 'stalking' introducido en la reforma del Código Penal de 2015.