Los sanitarios que atendieron a la víctima de La Torre atribuyen su muerte a la puñalada que recibió

León

Impecable. Así han definido su actuación los miembros del equipo de Emergencias que prestaron la primera atención a Mario Fuentes, la víctima del juicio de La Torre. Llegaron al lugar de los hechos apenas 8 minutos después de recibir el aviso. Mario, han dicho, subió a la ambulancia por su propio pie. Se mantuvo consciente, con dificultad para respirar y quejándose del dolor. Antes de trasladarlo al Hospital, han explicado, le pusieron oxígeno y le administraron analgésicos. El mismo protocolo, insisten, que se sigue en cualquier caso similar a ese.

Mario llegó al Hospital menos de media hora después de que llamar a Emergencias. Lo hizo en estado crítico. Allí le prestaron atención inmediata ante el riesgo de que entrara en parada pero su estado se complicó en cuestión de minutos. Sufrió esa parada cardiorespiratoria de la que no pudieron recuperarle. La médico de urgencias que lo atendió ha declarado que ese episodio fue consecuencia de la lesión por arma blanca con la que llegó.

Ante el intento de la defensa de cuestionar la actuación de los sanitarios todos han sido claros y rotundos al respecto. No hubo fallo alguno en los protocolos. Tampoco retrasos o carencias.