ADIF atribuye el descarrilamiento de abril a una “inadecuada disposición de la carga”
El ente ferroviario concluye así la investigación sobre las causas de este accidente del 10 de abril y sigue recabando datos del que ocurrió el 3 de octubre con otro tren bobinero
Imagen de archivo del descarrilamiento del 3 de octubre / Plataforma por el Ferrocarril Directo
Ribera del Duero
ADIF atribuye el descarrilamiento que sufrió el 10 de abril de este año el tren bobinero que presta servicio a las empresas del polígono Prado Marina a una “inadecuada disposición de la carga”. Así lo ha dado a conocer el ente que se ocupa del mantenimiento de la línea y que da así por finalizada la investigación sobre las causas de este accidente ferroviario.
El siniestro se produjo entre Sarracín y Villamayor de los Montes, donde uno de los 17 vagones que transportaban bobinas de chapa “presentaba su cargamento desplazado, descentrado y sin asegurar”, describe el informe. En consecuencia, estima que esta circunstancia es la “causa directa del descarrilamiento”, precisando que sobrepasaba los límites de tolerancia de reparto de cargas en el vagón.
Este episodio tuvo una réplica muy similar apenas medio año después, cuando entre Oquillas y Gumiel de Izán el 3 de octubre descarrilaron los tres vagones de cola de de otro tren de mercancías que también transportaba una carga de este tipo. ADIF señala que a día de hoy aún permanece abierto el proceso de recogida de información de este accidente.
A día de hoy, en ambas zonas se desarrollan obras de sustitución de las traviesas dañadas, Limitaciones Temporales de Velocidad a 30 km/h. A medida que concluyan estos trabajos, señala ADIF que se irá levantando progresivamente, hasta su supresión definitiva.
