Ribera comienza una vendimia que pondrá a prueba más que nunca la profesionalidad del sector

Ribera del Duero

La primera semana de otoño arranca en la Ribera del Duero con casi 200 bodegas abiertas para que entre la uva, de la que ya hay más de 18 millones de kilos recogidos. Es el inicio de una vendimia que se generalizará antes de llegar al fin de semana en toda la comarca, aunque si hay una característica que marcará las labores de esta temporada es la desigualdad en el ritmo de maduración y en el impacto de la meteorología,, sobre todo de las últimas semanas. Así lo explica el director de Viticultura y Enología del Consejo Regulador, Alberto Tobes, quien en su informe técnico de inicio de campaña anuncia que esta será "una campaña dilatada en el tiempo en la que cada parcela tendrá que ser vendimiada en el momento preciso". Por eso pone en valor el papel que desempeñarán los y las profesionales del sector en campañas como la actual con tanta y tan diversa incidencia de la meteorología. "Su papel es fundamental incluso antes de que la uva llegue a la bodega, porque la calidad de un vino en un 90% está en la viña" afirma Tobes. "Tienen que decidir qué parcela vendimiar, cuál está ya en su punto óptimo para el tipo de vino que quieren elaborar"

Tobes matiza las primeras impresiones generalizadas de que esta será una vendimia corta. Aunque hasta finales de agosto el tamaño del grano era menor al habitual por la escasez de lluvias durante buena parte de la primavera y todo el verano, el agua de las últimas semanas ha engordado el fruto y habrá que esperar hasta e final de la campaña para tener una valoración real. Lo que está claro es que dichas lluvias han retrasado la maduración de la uva en los terrenos donde ha caído. Aunque de nuevo hay que analizar este factor parcela a parcela, el fruto en general se encuentra por debajo de valores de campañas anteriores en algunos factores vinculados al color o la acidez. El informe técnico de inicio de vendimia, firmado el pasado día 20 de septiembre, concluye que en este momento las viñas tienen "fruto equilibrado, de tamaño medio, con una acidez ligeramente baja y cantidades de antocianos y puntos de color no tan elevados como en anteriores campañas, que requerirá todavía un correcto fin de maduración, siempre que la meteorología de las próximas semanas sea favorable y lo permita en las diferentes zonas de la Denominación de Origen"