Preparados para conquistar corazones y emocionar a todo Aranda

Aranda de Duero

Merino surgió en Madrid en 2019. Se autodefine como una formación "que se mete sin permiso en las emociones de la gente" con directos en los que conquistan corazones y con un pop "de alto voltaje emocional". Acoge el apellido de Sandra, su vocalista, que cuenta con la fiel compañía de Álex Gallego. Ambos se han asomado este martes a La Ventana Edición Ribera como avance de lo que este viernes -22.30 horas- expondrán en el concierto que van a desarrollar en Café Central. "Lo de que nos colamos en las emociones de la gente viene a raíz de un concurso que hicimos en Mad Cool, fue lo que nos dijeron, nos gustó y así lo asumimos", dice este último.

Merino "se ha ido formando de una manera muy natural", desde que ambos se conocieran en 2016, y poco a poco "fuimos a más, creando este proyecto hasta que nos metimos a grabar nuestro primer disco y buscar ese sonido", explica Sandra. "Lo más difícil son los primeros pasos, arrancar el carro y que se mueva por inercia. Cuando lo notas ya empujas diferente y se ven más los resultados", añade Gallego, quien reconoce que en esos inicios musicales "es difícil conseguir que te den oportunidades y te abran las puertas de las salas", pero "cuando empieza a haber ruido, y la gente te dice que le has alegrado la semana es la leche".

Ahora que el grupo ha ido avanzando y sumando más infraestructura, el trabajo extra se ha reducido, pero advierten también en la parte musical de que los espectadores "se van a encontrar un viaje emocional en el que ellos van a entrar de una manera y salir de otra, con muchas emociones", en un concierto “muy especial porque hemos preparado una actuación a trío, con la idea de experimentar, y de dar sorpresas".

Con la pasión con la que Merino vive la música, este viernes tratarán de conquistar muchos oídos, a sabiendas de que Aranda es toda una meca musical con un buque insignia como Sonorama Ribera, y en el cual reconocen "nos encantaría estar". Pero para ello saben que primero han de dar sus primeros pasos en la Ribera, y en ellos no puede faltar su alto voltaje.