El juez señala al autor confeso de la explosión de la calle Alcón como único responsable de 300.000 euros de indemnizaciones y absuelve a las aseguradoras
El condenado a 4 años y 9 meses de prisión roció el piso con gasolina que provocó la explosión de gas con la que desapareció parte del inmueble mientras él llegaba a comisaría para confesar "con la ceja y la pestaña izquierdas, chamuscadas"
Ponferrada
El autor confeso de la voladura del edificio número 21 de la calle Alcón de Ponferrada tendrá que abonar más de 300.000 euros en indemnizaciones, según la sentencia que finalmente ha emitido el Magistrado del juzgado de lo Penal de Ponferrada y en la que se absuelve a las compañías aseguradoras de las correspondientes compensaciones por daños, incluida la posible demolición y reconstrucción del edificio.
Se completa así la resolución judicial después de que en la vista el acusado asumiese la pena de cárcel de 4 años y nueve meses con la que reconocía la autoría de los delitos que se derivan de un suceso con el que respondió al anuncio de desahucio que tenía previsto. Se considera probado que el inquilino prendió fuego con un mechero junto a la puerta al reguero de gasolina que había derramado por las habitaciones provocando una deflagración/explosión de gas cuya onda expansiva causó que la techumbre de la vivienda del segundo piso y la mayor parte de su fachada frontal, así como la cubierta del inmueble, colapsaran, quedando reducidas a unos escombros que se desplomaron sobre varios vehículos estacionados en la calle.
De hecho, se refleja que en el momento de su detención portaba dos mecheros de plástico, desprendía un fuerte olor a humo y a gasolina, teniendo la ceja y la pestaña del lado izquierdo con un ligero chamuscamiento por efecto del fogonazo producido por los vapores de la gasolina al aplicarle una llama directa, al igual que en el lado derecho tanto en la piel como en las cejas y en la barba.
J.C.G.. es, por tanto, el único responsable de cara a los perjudicados, tanto particulares como de las compañías Generali, Plus Ultra, Allianz Seguros y Mapfre.
El propietario del inmueble, Maximino Álvarez, que ha recibido ya más de 64.000 euros de indemnización verá incrementada esta cantidad hasta los casi 197.000 euros si se acredita con la declaración de ruina del ayuntamiento que la voladura causó daños estructurales irreparables. Además, el juez deja la puerta abierta a la posibilidad de que pueda reclamar por la vía civil la indemnización de otros daños o conceptos derivados del hecho delictivo.
La jurisprudencia avala que un propietario queda excluido de la responsabilidad del inquilino por actos molestos, insalubres o peligrosos cuando no ha tenido previo conocimiento de ello, así que Maximino Álvarez no tiene que asumir ningún coste a pesar de que el seguro no contemplaba la presencia del inquilino en el domicilio.
En cuanto a los cuatro vehículos tasados por daños, el condenado tendrá que pagar cerca de 16 mil euros, cantidad a la que se suman otros 3.400 euros por daños al edificio número 23, posterior al siniestrado para resolver los problemas que la deflagración ocasionó en la puerta de entrada y otros 3.000 euros por los gastos de la intervención de los bomberos en la extinción del incendio.
Trámite de ruina:
En estos momentos el expediente abierto por el propietario está pendiente del informe de arquitectura municipal tras las alegaciones presentadas por la aseguradora oponiéndose a la solicitud de ruina.
