La Semana Santa de Zamora da comienzo con el traslado del Nazareno de San Frontis
Cientos de zamoranos acompañan al "mozo" en su camino hasta la Catedral
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El "mozo" camino de la Catedral
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El Nazareno de San Frontis está en la calle para anunciarle a Zamora que ya vuelve a vivir la Pasión, la de la normalidad, aunque lo haga sin un Museo de Semana Santa que fue emblema del esplendor de la ciudad y que ahora camina entre dos luces, mirando al futuro sin olvidar su pasado.
Ya carga la cruz sobre su túnica de terciopelo morado y ya se han llenado las calles de zamoranos que regresan a esta su ciudad del alma al compás de la marcha del Maestro Cerveró que es nombre a este Nazareno de barrio humilde.
Nazareno del arrabal zamorano que entre velas y fieles llama a la ciudad al recogimiento de la semana grande que empieza sin más alaracas que unas marchas fúnebres y un Cristo de barrio que camina hasta la ciudad medieval.
Regresa a Zamora el olor a garrapiñadas, las palmas, el silencio y a la vez el ruido de una ciudad que vuelve a latir diez días al año.
Ya está el Nazareno en la Catedral, ya lo han acompañado los hijos de San Frontis y allí ya se ha reunido con su madre Esperanza.