La 'Marcha blanca' celebra su primer aniversario en Villablino con muchas promesas pendientes
Los profesionales conseguidos están dispuestos a irse, no han llegado los recursos materiales solicitados y no se han corregido los desperfectos del centro sociosanitario
Ponferrada
Hace justo un año, 250 personas salían de Villablino para participar en la Marcha Blanca, una movilización que recorrió a pié durante 5 días los más de 70 kilómetros que separan la comarca de Laciana del Hospital del Bierzo con el único objetivo de mejorar los recursos de la sanidad pública para las más de 8.000 tarjetas sanitarias de la zona.
En aquel momento, Villablino contaba con apenas dos médicos de la dotación de 14 profesionales que corresponden a las instalaciones sanitarias, no disponían de suficientes ambulancias, el centro sociosanitario presentaba muchas deficiencias y tampoco se convocaba el consejo de salud de zona.
Tras la Marcha Blanca, el consejero de Sanidad se comprometió a subsanar esas carencias y, de hecho, logró contratar seis nuevos médicos en apenas un mes. Hoy esas contrataciones están en el aire, la ambulancia no ha llegado, el centro está pendiente de las obras y el consejo se convocó, sin éxito, hace unas semanas.
Se trata de un balance negativo, reconoce la portavoz de la plataforma en defensa de la sanidad pública de Laciana, Pilar Carrasco, porque apenas se han materializado los acuerdos, aunque, insiste, lo poco que se ha conseguido ha sido gracias a las protestas de los ciudadanos.
En Ponferrada, los participantes en la marcha blanca eran recibidos por 4.000 personas y se unían a la plataforma en defensa de la sanidad pública del Bierzo momento en el que ambos colectivos comenzaron a caminar como uno solo. De hecho, juntos han convocado el pasado mes de enero el 'Abrazo a tu Hospital’ y juntos esperan acordar nuevas protestas conjuntas con el resto de plataformas sanitarias autonómicas el próximo 4 de marzo.
Es importante, asegura Carrasco, garantizar que las inversiones públicas no se dirigen a la sanidad privada y que los usuarios mantengan un servicio que han logrado gracias a su esfuerzo y espíritu de lucha.
La portavoz asegura que la consejería debe sentir que los ciudadanos no están dispuesto a ceder su derecho a la asistencia sanitaria pública.