La ADRI valora los esperanzadores datos poblacionales de la comarca

Ribera del Duero

La Ribera del Duero burgalesa puede considerarse una afortunada. En medio del caos demográfico y de bajada en la comunidad e incluso la provincia de Burgos, en la comarca se mantiene la población. Es lo que reflejan los datos del INE que dio a conocer esta misma semana la ADRI Ribera del Duero, con quien hemos valorado unas estadísticas que son para mostrar satisfacción

"Siempre hemos dicho que nuestra situación de partida es diferente al resto. Estamos llegando al valle de la curva de población y hay que luchar para que esa curva se revierta en positivo y ganemos. Es un dato bastante optimista el de este año por haber prácticamente mantenido mientras otras zonas caen, pero el reto ahora está en crecer", explica Héctor Ibáñez, explicando que "la zona vitivinícola hace que haya actividad y que venga población inmigrante", pero señalando a la vivienda en buenas condiciones "como gran problema para asentar población", cuestión que en los próximos años "trabajaremos desde la ADRI".

Mirella de Pablo, técnica del ADRI, es la encargada de desarrollar este observatorio poblacional. "Habitualmente todos los años tenemos que actualizar los datos. Y sí vemos que aunque hay una tendencia a la bajada no es acentuada como en otras zonas a nivel nacional. Años atrás ha habido una aceleración, y vemos de forma optimista que la mitad de nuestra comarca mantiene o incrementa la población", explica, aseverando que "partíamos del año anterior por los efectos de la pandemia con lo que bajaron las tasas, pero no es tan negativo como en otras zonas y por nuestra parte no estamos del todo contentos", aunque "esperamos y deseamos ver un incremento poco a poco".