La delegada del Gobierno propone extender a otros lugares de Castilla y León las medidas de seguridad de Sonorama Ribera

Aranda de Duero

La edición 25 aniversario de Sonorama Ribera ha confirmado su fama de festival seguro y tranquilo, apto incluso para disfrutar en familia. Una imagen que ni siquiera empañan los pinchazos de los que refirieron ser objeto tres asistentes, en ninguno de los cuales se detectó la presencia de sustancias tóxicas. Por lo demás los escasos incidentes se debieron a algún golpe de calor y el habitual robo de carteras o móviles de grandes concentraciones. “Yo siempre pongo como ejemplo la imagen de la madre que va con sus hijos pequeños a Sonorama, que es bastante habitual” ejemplifica gráficamente el Jefe de la Comisaría de la Policía Nacional en Aranda, Joaquín Gomá. “Nadie pensaría que una madre va a llevar a sus hijos a un lugar en el que corren peligro.”

Con el aval de estos buenos resultados el dispositivo especial desplegado por las fuerzas de seguridad en colaboración con entidades sanitarias y de protección civil se va a extender a partir de ahora a los eventos y festejos multitudinarios que se celebren en la comunidad. Así lo va a exponer este martes la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, en una serie de reuniones que mantendrá otras entidades públicas y privadas como la agencia de protección civil de la Junta o la federación de municipios y provincias y el sector empresarial de la seguridad o del espectáculo.

Entre las medidas que la delegada del gobierno considera eficaces y exportables a otros eventos están el control de equipajes en estaciones de autobuses y otros medios de transporte público, la presencia de agentes de policía de paisano en los lugares más críticos y la coordinación entre fuerzas de seguridad estatales y locales con los profesionales sanitarios y con otras entidades como Cruz Roja o Protección Civil