Más de mil hectáreas quemadas en una semana. Es el negro balance de los incendios que se han registrado, en la semana más complicada en lo que llevamos de verano en la región, especialmente en la provincia de Ciudad Real Desde el pasado 22 de julio, se han sucedido el de Argamasilla de Calatrava, (con más de 600 hectáreas, el de mayores dimensiones) Almadén y el último en Villarta de San Juan este domingo. El delegado de Desarrollo Sostenible, Casto Sanchez vuelve a hacer un llamamiento para los profesionales que faenan en el medio natural para que tengan en cuenta el Índice Potencial de Propagación de Incendios Forestales y en el caso de calor extremo, no las lleven a cabo, recordando que desde el 7 de junio estas labores están limitadas como medida preventiva. En el caso del último incendio, el de Villarta de San Juan, este domingo fueron pasto de las llamas 86 hectáreas a las que hay que sumar otras 111 hectáreas quemadas en la misma zona, hace siete días, circunstancia que se esta investigando. Incendio que al igual que el de Argamasilla, alcanzó el nivel 1, por su cercanía a una planta solar fotovoltaica, que se vio obligada a activar el plan de emergencia exterior, como establece el protocolo. En su extinción han participado 40 personas y 11 medios, 3 de ellos aéreos. En Torrenueva, también este domingo se extinguía otro incendio, en torno a las 15.32 h, en el que participaban 39 personas y 7 medios. Se detectó a mediodía. Fin de semana en el que se produjeron además otros incendios en Almadén, donde se movilizaron 13 medios y 65 efectivos del Plan Infocam, obligando a desalojar varias fincas privadas y otro más en Corral de Calatrava.