El Domingo de Ramos se afianza como el día más potente de la Semana Santa de Cuenca
La hostelería del Casco Antiguo resalta que es un día que la ciudad coge con muchas ganas, pero los vecinos de la parte alta apelan a un mayor civismo o control
Botellines contra orines: los restos del Domingo de Ramos en Cuenca
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Cuenca
El Domingo de Ramos se afianza como la fecha más potente del año para la hostelería del Casco Antiguo, al mismo nivel o incluso por encima de los días más fuertes de San Mateo. Esto también conlleva quejas de los vecinos, que reclaman un mayor control y elementos que reduzcan la suciedad, como urinarios públicos.
Desde el sector hostelero reconocen que es el día más importante de la Semana Santa, ya que la afluencia de público se mantiene durante varias horas tras el fin de la procesión. El gerente de varios establecimientos de la Plaza Mayor, Cristian Sánchez, ha reconocido que es una fiesta que todo la ciudad encara con mucha alegría para comenzar la Semana Santa. Ha apelado también al civismo de todo el mundo para respetar el entorno del Casco Antiguo.
Quejas de los vecinos
También desde la Asociación de Vecinos de este barrio han lamentado la falta de civismo, que deja imágenes que califican de “vergonzosas”. El presidente, Jesús Reyes, ha afirmado que si apelar a ese civismo no da resultado, la única solución es un mayor control policial, e instalar más recursos como urinarios en diferentes puntos del barrio.
La procesión del Hosanna se saldó con cuatro desvanecimientos, dos de los cuales tuvieron que ser trasladados a un centro sanitario, mientras que en las horas posteriores hubo seis atenciones, una por un síncope que obligó a realizar un traslado, y cinco curas leves.
Los Puntos Violeta no tuvieron que realizar ninguna intervención, aunque sí contabilizaron 178 sensibilizaciones.