Vuelve a funcionar el colector de Astrana Marín, el principal de la ciudad de Cuenca
Ocho meses de obras a 18 metros de profundidad y dos millones de euros para la "mayor obra hidráulica" realizada en Cuenca, según el alcalde
El colector de Astrana Marín, el más importante de Cuenca, ha comenzado a funcionar tras el fin de las reparaciones / Ayuntamiento Cuenca
Cuenca
Vuelve a funcionar el colector de Astrana Marín, el principal de la ciudad de Cuenca y que recibe un tercio de sus aguas pluviales y residuales, tras el arreglo al que se le ha sometido en los últimos ocho meses. El Ayuntamiento ha comenzado ya la retirada de las canalizaciones alternativas y los sistemas de bombeo que se habían instalado en la calle Astrana Marín.
El alcalde, Darío Dolz, ha recordado que ha sido la obra hidráulica más relevante que se ha acometido en las redes de la capital conquense, con un importe de dos millones de euros y trabajando a 18 metros de profundidad, donde discurre el colector que colapsó en 2020.
Ya ha comenzado la retirada de las canalizaciones alternativas y los sistemas de bombeo / Ayuntamiento Cuenca
Una vez ha finalizado la actuación y se retiran las canalizaciones, se taparán los agujeros con los que se ha llevado a cabo la obra y se repondrá el firme del patio del colegio Fray Luis de León.
El colapso de este colector, de 70 años de antigüedad, provocó en 2020 la aparición de un gran socavón en el patio del colegio “Fray Luis de León” y malos olores en el entorno. Para acometer los trabajos a gran profundidad se derribó el pabellón polideportivo “Luis Yúfera”, cuyo traslado estaba ya planteado.
Las obras del colector de Astrana Marín han obligado a trabajar a 18 metros de profundidad / Ayuntamiento Cuenca
Durante la obra, que comenzó en noviembre, se han extraído hasta un millar de toneladas de residuos que cegaban la canalización. Además, el Ayuntamiento contempla en los presupuestos municipales una partida de 450.000 euros para el mantenimiento de los colectores de la ciudad, en los que, según recordaba el alcalde, nunca se había invertido.
