Agricultura ha pagado ya las indemnizaciones por el ganado sacrificado en Cuenca a causa de la viruela ovina
En Villaescusa de Haro fueron más de 28.000 animales sacrificados; más de 2.100 en Tébar y cerca de 1.700 en La Alberca de Záncara
Ganado ovino / Radio Baza
Cuenca
Las localidades conquenses afectadas por brotes de viruela ovina y caprina están recuperando la normalidad, y el suministro de leche para elaboración de otros productos está garantizado. Así lo ha indicado el consejero de Agricultura, Francisco Martínez Arroyo, que ha subrayado que se han puesto en marcha líneas de ayuda para los ganaderos, a fin de retomar su actividad.
En Villaescusa de Haro, donde un brote obligó a sacrificar más de 28.000 animales, ya se está introduciendo ganado centinela para poder recuperar la cabaña. En La Alberca de Záncara se han sacrificado cerca de 1.700 cabezas de ganado, y más de 2.100 en Tébar, entre ovejas y corderos.
Martínez Arroyo ha destacado que, para estos dos municipios, habrá que esperar hasta finales de enero para poder reintroducir animales, pero sí ha resaltado que se han pagado ya las indemnizaciones, y se ha puesto en marcha una nueva línea de ayudas.
Por otra parte, el consejero ha incidido en que se han buscado vías alternativas para evitar que los productores de queso y similares sufrieran desabastecimiento a causa de estos sacrificios.
Martínez Arroyo también ha reiterado que la viruela ovina y caprina es una enfermedad que afecta exclusivamente a las especies animales y no puede transmitirse al ser humano.
En cualquier caso, ha hecho hincapié en la necesidad de seguir trabajando por la salud animal, y ha recordado los buenos resultados obtenidos en la erradicación de la tuberculosis y la brucelosis, con el convencimiento de que sucederá igual con la viruela ovina.
