Apuros de la Real Sociedad frente al Cazalegas pese al resultado final (1-4)

Talavera de la Reina

El 13 de noviembre del 2022 será un día recordado por el fútbol provincial de Toledo por ser el día en el que el Cazalegas se midió al tercera clasidicado de Primera División y no solo eso: por haberle hecho pasar apuros en un partido disputado en el Municipal El Prado de Talavera, lleno con 4.000 espectadores.

Había mucha diferencia de categorías entre un equipo y otro pero cuando los entrenadores en las previas parece que tirán de tópicos y apelan al "son once contra once" en estas eliminatorias coperas se agolpan los ejemplos de que es así y muchas veces el tópico se convierte en verdad.

El partido empezó bien para la Real ya que en su primera posesión de balón, sin tocarla el equipo de enfrente, empezó una jugada desde la izquerda hasta la derecha definida a la perfección por Robert Navarro que anotó raso y por el palo del portero Machuca que fue homenajeado en los prolegómenos.

La posesión, como se esperaba, fue de la Real Sociedad y su ritmo de juego era mayor que el del equipo toledano aunque este con el paso de los minutos se fue asentando poco a poco y lograba en ocasiones salir bien con balón jugado y con profundidad por la banda izquierda.

Pero el ritmo con balón era de la Real y el dominio era donostiarra. No asñi la efectividad y es que los txuri-urdin fueron acumulando ocasiones de gol, otra vez, de Navarro, de Karrikaburu, de Pablo Marín desde fuera del área...

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El Cazalegas, replegado, conseguía resistir por esos fallos de definición donostiarras que se siguieron repitiendo: el último fue un remate de Illarramendi de cabeza. En el último minuto de la primera parte hubo un aviso cazalegueño por la izquierda que sería premonitorio de cara a la segunda parte.

Tras la reanudación el Cazalegas jugó algo más directo y vivió un poco más cómodo. Las ocasiones siguieron siendo blanquiazules pero de una manera menos clara y más espaciadas en el tiempo: Karrikaburu tuvo un uno contra uno que desvió Machuca, un tiro lejano de Pablo Marín... pero ya una primera llegada clara del equipo naranja por la izquierda rematada fuera por poco por Alfre Ramos. Con el paso de los minutos el equipo local empezó a creérselo algo más y la Real a llegar menos. Alguacil, con el 0-1, veía que el partido podía complicarse y decidió meter a Sorloth y a Brais Méndez.

Efectivamente, se complicó. En el minuto 68 otra llegada por la izquierda acabó en un centro al segundo palo en el que el debutante Zubiaurre se quedó a media salida. Rubén Rivera, de cabeza, le mandó el balón por encima confirmando que el partido se le compliacaba a la Real. DE hecho, tras la jugada del empate el modesto CAzalegas le lanzó una contra a la Real que le obligó a despertar.

Con los cambios mencionados, y la entrada después de Mikel Merino y Gorosabel, el equipo vasco se vió obligado a responder y su centro del campo encontró a Sorloth con mucha más claridad que en el resto del partido a Karrikaburu. El noruego, al espacio y frente a una defensa padeciando ya el desgaste físico, disfrutó de varios mano a mano con el portero talaverano y dió tranquilidad a su equipo marcando en el minuto 76 y también en el 78. Luego marcó Mikel Merino rematando un corner pero es que el nórdico tuvo la posibilidad del hat trick hasta en tres ocasiones más, pegando en una de ellas al larguero.

Y así finalizó un partido indigesto para la Real Sociedad, que hasta el cuarto de hora final no las tenía todas consigo.

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