"¿Dónde está la empatía?": una persona ciega lleva cuatro años esperando por una cita y cuando el día llega no la atienden

Tenerife

"Es una persona ciega total, venía de Candelaria y llegó tarde. Al entrar no dejaron pasar a su acompañante y la persona que la atiende no la localiza en la hoja de citas", explica Ana Mengíbar, portavoz del colectivo Queremos Movernos. "Cuando lo comunica a su acompañante (que está fuera) aclaran la situación. Entre el retraso en llegar y el retraso en localizar su cita, transcurre un tiempo que acabó provocando que no atendieran a esta persona" añade. "Tenemos que soportar una espera de cuatro años para que nos atiendan pero ellos no pueden esperar una hora y media por una persona ciega", denuncia Ana Mengíbar, portavoz del colectivo Queremos Movernos

"Estamos ante un caso de carencia de empatía, carencia de sensibilidad y carencia de memoria para recordar que algunas personas han estado en esas salas de espera horas y horas. Y, en este caso, el cincuenta por ciento del retraso lo provoca el funcionario que la atiende", explica Mengíbar. A esto hay que añadir que las calles de Tenerife son auténticos laberintos llenos de obstáculos que dificultan enormemente la circulación ágil de personas con discapacidad. El propio colectivo Queremos Movernos ha denunciado una y otra vez la tremenda desidia de la Administración que no hace nada para corregir esta situación.

"Tratan a las personas como si fueran papeles"

Según el relato de Mangíbar, al haber transcurrido una hora y media, el funcionario le indicó que se marchara y que volverían a citarla por medio de una carta. "La apercibieron de que si llegaba tarde la próxima vez, tendrían que iniciar de nuevo el expediente. Una espera por ellos de cuatro años vale, pero una espera de una hora y media por un ciudadanos es castigable", valora la portavoz del colectivo. "Esta persona solicitó la calificación de discapacidad y dependencia hace cuatro años, se registraron al mismo tiempo, pero solo han tramitado la dependencia. La discapacidad ni siquiera está gestionada", añade Mengíbar.

"Gestionar el área de Discapacidad y Dependencia no sólo es gestionar papeles y tratar a las personas como a papeles", denuncia. "¿No se podía aprovechar la valoración que hicieron para dependencia?¿No valía el informe emitido?¿Ahora, si solicita la tarjeta de estacionamiento, espera otros cuatro años? Esto es un trato vejatorio y una actuación carente de humanidad, de calidad en el servicio y de responsabilidad ante quien está tramitando el reconocimiento de unos derechos" añade. "Un servicio que, históricamente te ha hecho esperar a los ciudadanos horas y horas, ahora no espera y amenaza si el ciudadano se retrasa una vez mas·, concluye.