Los veterinarios de Baleares paran para protestar por el sistema de registro de prescipción de antibióticos
Este sistema entró en vigor el pasado dos de enero y los veterinarios denuncian que no han tenido tiempo suficiente para adaptarse, porque supone una mayor carga burocrática
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Palma
Los centros veterinarios de las islas han parado este mediodía para protestar por la implantación de PRESVET. Se trata de un sistema que obliga a los profesionales a registrar y ofrecer datos detallados de las prescripciones de antibióticos para animales. Este sistema entró en vigor el pasado dos de enero y los veterinarios denuncian que no han tenido tiempo suficiente para adaptarse, porque supone una mayor carga burocrática. El reglamento contempla cuantiosas multas para los profesionales que no registren las prescripciones.
El Colegio de Veterinarios de las islas, que no se ha sumado a los paros, reclama una moratoria de un año para garantizar la adaptación de las clínicas al nuevo sistema. Su implantación parte de una normativa europea de 2019 que quiere controlar la resistencia de las bacterias a los antibióticos. Sin embargo, apenas lleva un mes funcionando bajo apercibimiento de multa. La vicesecretaria del COVIB, Ana Sancha, cree que es "muy pronto" porque los cambios en los programas y el engranaje que involucra el volcado de datos de PRESVET "necesita un periodo de flexibilidad y adaptación".
Sancha considera que PRESVET ha puesto sobre la mesa la inexistencia de medicamentos veterinarios suficientes en las farmacias, que solo tienen aproximadamente el 2% de fármacos para animales. Esto obliga a los veterinarios a ceder los medicamentos de su farmacia con los comprimidos necesarios e imprescindibles para asegurar los tratamientos de los pacientes.
Los paros se han realizado hoy entre las once y las doce del mediodía. Muchas clínicas pequeñas de las islas han aprovechado para protestar por el incremento de trabajo que supone el sistema PRESVET en los centros con pocos trabajadores. Toni Llaneras es propietario de Veterinaritx, una clínica veterinaria en Felanitx. Cree que el nuevo sistema puede generar problemas en profesionales que no estén al día en el manejo de herramientas informáticas. Explica que los veterinarios tienen que rellenar ahora 14 parámetros diferentes cada vez que recetan un antibiótico, lo que provoca una mayor carga de trabajo y ralentización de los procesos en las clínicas pequeñas que cuentan con poco personal.
"Cada vez que prescribimos un antibiótico hay que entrar, abrir la sesión porque va caducando y rellenar 14 parámetros diferentes. Eso cada vez. Los programas de gestión se han adaptado y dan facilidades, pero al final como pueden suponer multas a veces necesitas hacer siempre un repaso y un doble check para ver que todo está correcto" señala Llaneras.
Él es partidario de una moratoria que permita una mejor adaptación al sistema y pone en duda la infraestructura que procesa la información que los veterinarios instroducen en PRESVET y que tiene como objetivo último controlar la resistencia de las bacterias a los antibióticos. Los veterinarios recuerdan otras reivindicaciones históricas como la reducción del IVA veterinario en las clínicas, que sigue en el 21% a diferencia de otras profesiones sanitarias que están exentas.