El IMAS renuncia al Polvorín de Inca porque la "polémica" pone en peligro la "privacidad" de los menores no acompañados

Palma

El Consell de Mallorca renuncia al polvorín de Inca como centro de primera acogida para menores migrantes no acompañados porque la presión mediática hace inviable garantizar su privacidad y la de los trabajadores. El presidente del Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales, Guillermo Sánchez, ha cargado contra el PSOE por haber azuzado la polémica sobre este emplazamiento, ofrecido en primera instancia por la delegación del Gobierno de Baleares para acoger a los menores migrantes que llegan sin compañía de adultos.

El IMAS atendió durante el año pasado a un total de 367 menores migrantes, el doble que los auxiliados en 2023. Todos fueron varones excepto seis niñas. Los servicios de acogida, según los datos ofrecidos hoy por el presidente del IMAS, revelan una sobresaturación de los servicios del 70%. Sánchez ha hablado de un rechazo social generalizado a estos menores. Ha lamentado que la polémica generada sobre el polvorín, que el PSOE con el alcalde de Inca a la cabeza denunció que no estaba preparado para acoger menores, haga imposible velar por la intimidad y privacidad de sus futuros usuarios y de sus trabajadores. Por eso, han transmitido a la Delegación del Gobierno que descartan el polvorín como futura ubicación para un centro. "Aunque el polvorín cuenta con caracteríasticas técnicas adecuadas, como certificaron los técnicos del IMAS, la exposición mediática ha generado un entorno que hace imposible garantizar la intimidad de estos menores. La normativa nos obliga a proteger su privacidad e intimidad y con la situación actual ya no es posible" ha señalado.

Sánchez ha vuelto a reclamar medidas al Gobierno central para aliviar la saturación de los centros, una docena en la isla de Mallorca. Advierte de que la falta de recursos humanos para atender el volumen de llegadas pone en peligro el propio sistema de atención. Por eso, no descarta acudir a la acogida en tiendas de campaña en el futuro si no se encuentran espacios para acoger con garantías. "Acudir a tiendas de campaña reconocemos que es un recurso no idóneo e indigno para los menores, pero vamos a ver cómo va la progresión. Si llegara un punto en el que ya no pudierámos acogerles en recursos normalizados, como las viviendas que son los recursos que tenemos actualmente, no descartamos la habilitación de recursos alternativos como pudieran ser las tiendas de campaña" ha subrayado. El presidente del IMAS ha subrayado que "si no existe la capacidad económica, material o de recursos humanos" para prestar un acompañamiento integral, la acogida que se podrá facilitar a estos menores en el futuro "será meramente asistencial", como la que actualmente se ofrece en Canarias.