Manual para vivir hoy, con los expertos de Es Coach la SER

Mahón

Los coaches Bernat Fortuny y Carola Lamberti abordan un tema tan sutil como esencial en la vida cotidiana: la importancia de los silencios. A menudo, en nuestra cultura y rutinas diarias, tendemos a huir de los espacios en blanco, esos momentos de pausa que pueden parecer incómodos o vacíos, especialmente en una conversación. Nos enseñan a llenar cada segundo con palabras, ideas o acciones, pero, ¿qué pasa cuando aprendemos a darle espacio al silencio?

En este capítulo, Fortuny y Lamberti nos invitan a reflexionar sobre cómo los silencios no solo son necesarios, sino que pueden ser herramientas poderosas de crecimiento personal y profesional. Los silencios permiten crear un espacio para la escucha activa, tanto de los demás como de nosotros mismos. En una conversación, los silencios nos brindan la oportunidad de procesar lo que hemos escuchado y responder de manera más consciente, en lugar de reaccionar de manera impulsiva o superficial. Además, ofrecen a la otra persona la sensación de ser verdaderamente escuchada, sin la presión de llenar los vacíos de forma inmediata.

Pero la reflexión va más allá de las interacciones sociales. Los silencios también son momentos clave para la introspección. En un mundo que avanza a ritmo vertiginoso, donde muchas veces estamos atrapados en un mar de tareas y distracciones, hacer una pausa y permitirnos un espacio de silencio puede ayudarnos a conectarnos con nuestras emociones, necesidades y deseos más profundos. Es en ese momento de calma cuando podemos evaluar situaciones, sopesar decisiones importantes y encontrar respuestas que en el ruido constante de la vida cotidiana a menudo se nos escapan.

Este episodio destaca la importancia de gestionar conscientemente los silencios en nuestra vida diaria. Fortuny y Lamberti nos muestran que, lejos de ser incómodos o inútiles, los silencios son un recurso valioso que nos ayuda a tomar decisiones más meditadas, a comunicarnos mejor y a vivir de forma más plena y equilibrada.

En este nuevo episodio de Es coach la SER, Bernat Fortuny y Carola Lamberti profundizan en un aspecto esencial de la experiencia humana: la sorpresa. La vida está llena de eventos inesperados, y nuestra capacidad para reaccionar ante ellos puede influir significativamente en cómo nos sentimos y actuamos. La sorpresa puede ser positiva o negativa, desde un acontecimiento alegre e inesperado, hasta un giro desafortunado que nos toma desprevenidos. ¿Cómo gestionamos esas emociones? ¿Es mejor estar abiertos a la sorpresa o intentar mantener el control para no dejarnos afectar?

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Fortuny y Lamberti discuten sobre cómo solemos reaccionar de manera diferente ante una sorpresa agradable que ante una negativa. Mientras que las sorpresas positivas suelen despertar alegría y entusiasmo, las negativas pueden generar confusión, miedo o frustración. En este capítulo, los coaches invitan a reflexionar sobre nuestras reacciones automáticas y a aprender a gestionarlas de manera más consciente y equilibrada. Cuando una sorpresa nos toma desprevenidos, es fácil quedarse bloqueado, sin saber qué hacer o cómo reaccionar. Sin embargo, parte del trabajo personal que proponen los especialistas es aprender a no dejar que esas emociones nos paralicen.

El episodio también plantea una pregunta clave: ¿debemos predisponernos a sorprendernos? En un mundo tan rutinario y predecible, a veces es fácil cerrarse ante lo nuevo por miedo a lo desconocido o por preferir la estabilidad. Sin embargo, los coaches sugieren que abrirse a la novedad y a lo inesperado puede enriquecer nuestras vidas, brindándonos oportunidades de crecimiento y aprendizaje. Aceptar las sorpresas, sean buenas o malas, sin reprimir nuestras emociones, puede ayudarnos a desarrollar una mayor resiliencia y flexibilidad mental, cualidades clave tanto en el ámbito personal como en el profesional.

A lo largo del episodio, Fortuny y Lamberti comparten ejemplos concretos y situaciones comunes, ofreciendo herramientas útiles para evitar que las sorpresas nos bloqueen o nos hagan perder el control. La clave está en encontrar un equilibrio: estar preparados para lo inesperado sin miedo a la novedad, pero también saber gestionar nuestras emociones cuando la vida nos sorprende.

En este episodio de Es coach la SER, Bernat Fortuny y Carola Lamberti nos invitan a reflexionar sobre la importancia de vivir el presente, un concepto esencial pero a menudo olvidado en el ritmo frenético de nuestras vidas. Muchos de nosotros vivimos atrapados entre dos extremos: por un lado, quienes se anclan en el pasado, dándole demasiada importancia a lo que ya fue, y por otro, quienes se obsesionan con alcanzar metas futuras, dejando de lado la riqueza del momento presente.

Los coaches destacan cómo el ritmo de vida actual nos empuja constantemente hacia adelante, siempre corriendo hacia el siguiente objetivo, lo que nos lleva a perder momentos valiosos con las personas que amamos y que tenemos cerca: familia, hijos, amigos. Este enfoque en el futuro puede impedirnos disfrutar de las pequeñas alegrías del día a día y nos desconecta de nuestra realidad inmediata. Sin embargo, vivir en el presente no significa ignorar nuestras metas o dejar de aprender del pasado, sino encontrar un equilibrio que nos permita disfrutar de lo que tenemos ahora, en lugar de estar siempre preocupados por lo que vendrá o por lo que ya sucedió.

De manera similar, Fortuny y Lamberti abordan el otro extremo: aquellas personas que quedan atrapadas en el pasado, reviviendo constantemente situaciones, errores o momentos que ya no pueden cambiar. Este apego al pasado puede bloquear nuestra capacidad para disfrutar del presente y seguir avanzando. A lo largo del capítulo, los coaches ofrecen herramientas para soltar ese peso, aprender de las experiencias pasadas sin dejar que nos definan, y centrarnos en lo que realmente importa: el aquí y el ahora.

Vivir el presente, como recuerdan los especialistas, también es entender que cada día es un regalo, un “presente” que nos es dado para disfrutar y compartir con quienes amamos. A través de ejemplos prácticos y reflexiones profundas, Fortuny y Lamberti nos animan a tomar conciencia de los momentos que vivimos y aprovecharlos al máximo, conectando con nuestra realidad y con las personas que nos rodean. Este episodio es una invitación a ralentizar el ritmo, soltar el pasado y abrazar la vida tal como es, en el momento presente.

En este episodio de Es coach la SER, Bernat Fortuny y Carola Lamberti se sumergen en el fascinante mundo de las emociones humanas, tomando como punto de partida la película de animación Del revés 2 de Pixar-Disney. Esta película, dirigida a un público infantil y familiar, explica de manera didáctica y visual cómo funcionan las diferentes emociones dentro de nosotros, destacando su importancia y cómo cada una de ellas juega un papel crucial en nuestro día a día. Los coaches aprovechan este enfoque accesible para profundizar en el entendimiento de las emociones y su relevancia en nuestras vidas.

En el filme, emociones como la alegría, la tristeza, el miedo o la ira tienen su propio color y personalidad, ayudando a los espectadores más jóvenes a comprender que todas las emociones, incluso aquellas que solemos considerar negativas, son necesarias para tener una vida equilibrada. Los coaches resaltan cómo la película introduce nuevas emociones, como la ansiedad, que tienden a aparecer con mayor frecuencia durante la pubertad y la adolescencia, un momento crítico en el desarrollo emocional de cualquier persona. Este punto es clave, ya que nos recuerda que las emociones evolucionan con la edad y las experiencias de vida.

Fortuny y Lamberti también destacan cómo la película refleja un enfoque que guarda cierta similitud con el modelo DISC, una técnica utilizada en psicología para analizar las personalidades humanas a través de colores, que representan distintos tipos de comportamiento y formas de interactuar con los demás. Este modelo gráfico y visual facilita la comprensión de cómo cada persona tiene una combinación única de emociones y características que influye en su forma de relacionarse. En el modelo DISC, los colores están asociados a diferentes estilos de personalidad: dominancia (rojo), influencia (amarillo), estabilidad (verde) y conciencia (azul), lo que nos ayuda a comprender mejor tanto nuestras propias emociones como las de los demás, y cómo interactuamos según nuestros rasgos predominantes.

Este capítulo se convierte en una reflexión profunda sobre cómo las emociones, tanto las más luminosas como las más difíciles de manejar, son esenciales para nuestro bienestar y desarrollo. Los coaches nos invitan a aceptarlas todas, sin juzgarlas, reconociendo que forman parte integral de nuestra humanidad y que entenderlas es clave para mejorar nuestras relaciones y nuestra vida diaria.

En este episodio de Es coach la SER, Bernat Fortuny y Carola Lamberti centran su atención en una de las emociones más incomprendidas y a menudo evitadas: la tristeza. Aunque no es una emoción popular ni una que muchos deseen experimentar, los coaches nos recuerdan su importancia fundamental en el equilibrio emocional. En una sociedad que tiende a edulcorarlo todo y a buscar constantemente estímulos que generen hormonas de la felicidad, como la serotonina, la dopamina, la oxitocina y las endorfinas, la tristeza queda relegada a un segundo plano, como si fuera una emoción a evitar a toda costa. Pero ¿realmente podemos vivir sin ella?

Fortuny y Lamberti subrayan que la tristeza es esencial para el bienestar emocional y psicológico, ya que nos permite procesar emociones profundas que, si no se expresan, pueden quedar reprimidas. Dejar que la tristeza fluya nos ayuda a liberar tensiones emocionales y a dar espacio a la sanación. Al tratar de reprimirla o evitarla, como a menudo ocurre en la cultura moderna, nos arriesgamos a acumular emociones no resueltas que, a largo plazo, pueden generar frustración, ansiedad e incluso afectarnos físicamente.

Además, los expertos señalan una paradoja interesante: si no somos capaces de experimentar la tristeza, ¿cómo podremos realmente apreciar y valorar la alegría? Ambas emociones están interconectadas, y solo cuando permitimos que la tristeza se exprese podemos sentir la verdadera plenitud de los momentos alegres. En lugar de ver la tristeza como una enemiga, Fortuny y Lamberti nos animan a aceptarla como una parte natural y necesaria de la vida, una emoción que nos ayuda a reflexionar, a soltar lo que ya no necesitamos y a prepararnos para nuevas etapas.

Este capítulo es una invitación a cambiar nuestra perspectiva sobre la tristeza, a dejar de verla como un obstáculo y a entenderla como un recurso valioso. Los coaches nos instan a ser conscientes de cómo, en nuestra sociedad actual, existe una tendencia a evitar cualquier tipo de incomodidad emocional, buscando siempre el placer inmediato. Sin embargo, aprender a vivir con la tristeza, a abrazarla cuando llega, nos permite crecer emocionalmente y nos enseña que todas las emociones, incluso las más difíciles, tienen un propósito y un valor en nuestra vida.

En este episodio de Es coach la SER, Bernat Fortuny y Carola Lamberti profundizan en dos emociones especialmente complejas: la culpa y la vergüenza. Estas emociones, aunque incómodas y a menudo evitadas, juegan un papel importante en nuestra vida emocional, y aprender a gestionarlas correctamente puede tener un impacto significativo en nuestro bienestar mental y emocional. Los coaches exploran cómo la culpa y la vergüenza, si no se manejan de manera adecuada, pueden convertirse en auténticas barreras psicológicas que nos impiden avanzar y enfrentar determinadas situaciones en nuestras vidas.

La culpa surge cuando sentimos que hemos hecho algo mal, ya sea en nuestras relaciones personales, profesionales o incluso en nuestra vida interna. Es una emoción que, en dosis saludables, nos ayuda a reflexionar sobre nuestros actos y a aprender de nuestros errores. Sin embargo, Fortuny y Lamberti advierten que, cuando no se gestiona correctamente, la culpa puede transformarse en un peso excesivo que nos paraliza, llevándonos a la autocrítica destructiva y a la incapacidad de perdonarnos. En este capítulo, los coaches ofrecen estrategias para trabajar la culpa de manera constructiva, permitiéndonos tomar responsabilidad por nuestros actos sin quedarnos atrapados en un ciclo de reproches internos.

La vergüenza, por otro lado, está más vinculada a cómo nos percibimos en relación con los demás. Es esa sensación de no ser lo suficientemente buenos o dignos en función de lo que creemos que los demás esperan de nosotros. La vergüenza puede ser devastadora, ya que afecta directamente a nuestra autoestima y nos hace sentir desconectados o inadecuados. Los expertos subrayan la importancia de entender por qué sentimos vergüenza y cómo muchas veces surge de expectativas poco realistas o del miedo al juicio ajeno. Al igual que con la culpa, la clave está en aprender a reconocer esta emoción, aceptarla y gestionarla de manera más saludable.

A lo largo del episodio, Fortuny y Lamberti destacan cómo, aunque estas emociones son difíciles de afrontar, pueden también ofrecer lecciones valiosas si las enfrentamos con una actitud de aprendizaje. La culpa y la vergüenza no deben ser ignoradas ni reprimidas, sino entendidas como señales que nos invitan a reflexionar sobre nuestras acciones, relaciones y creencias. Los coaches nos proporcionan herramientas prácticas para lidiar con estas emociones sin permitir que nos controlen, ayudándonos a liberarnos de las cargas emocionales que nos impiden avanzar.

Este capítulo nos recuerda que, al igual que con otras emociones, el valor de la culpa y la vergüenza reside en cómo las gestionamos. Aceptarlas y aprender de ellas es fundamental para vivir con mayor libertad emocional y para enfrentarnos mejor a los desafíos del día a día.