Baleares sancionará las fiestas molestas en viviendas de alquiler turístico
Los socialistas han denunciado en el Parlament la falta de control a las actividades náuticas
Ibiza
El pleno del Parlament ha aprobado este martes por unanimidad la toma en consideración de una proposición de ley de Més per Menorca para prevenir la celebración de fiestas ilegales y actividades molestas en vivienda que se comercialicen como estancias turísticas, que establecerá sanciones.
El diputado de Més per Menorca Josep Castells ha justificado la propuesta porque el actual marco jurídico no da respuesta al fenómeno de aprovechar el alquiler turístico para una actividad "que molesta" y que se ve agravado por la dificultad de perseguirlo por vía administrativa, de manera que deja indefensos a los ciudadanos que sufren sus efectos.
La propuesta implica ampliar el concepto de fiesta ilegal e incorporarlo en la Ley de Actividades, para las que se celebran en viviendas de alquiler turístico entre las 23 y las 8 horas, ha detallado.
Més per Menorca quiere sancionar la no adopción de medidas para evitar las molestas por parte de los propietarios de los pisos turísticos, porque "el propietario no puede lavarse las manos de esta problemática", y que se añada la reiteración como agravante.
En cuanto a las sanciones, para casos leves serían de 1.500 a 3.000 euros; y para la infracción grave de entre 15.000 y 30.000 euros, con la sanción accesoria de posible pérdida de la declaración responsable para el propietario del inmueble y la imposibilidad de recuperarla durante tres años.
El diputado socialista Àlex Pitaluga ha destacado que la propuesta aborda la mayor interacción entre los turistas y residentes y uno de los temas que más preocupa a la ciudadanía, y ha subrayado que "no va de turismofobia, sino de residentefilia", porque la prohibición de las fiestas implica la libertad del derecho al descanso.
Pitaluga ha planteado otro tipo de fiestas sobre las que "habría que reflexionar", que son las celebradas en playas públicas.
La diputada de Vox María José Verdú es partidaria de medidas decididas que pongan fin a los abusos, promuevan la seguridad y un turismo de calidad, pero ha criticado el "enfoque punitivo excesivo" de la propuesta de Més, porque el propietario no tiene por qué saber lo que sucede en la vivienda que alquila. Ha advertido de que la norma puede disuadir a posibles turistas y ha pedido campañas de concienciación.
El portavoz de Més per Mallorca, Lluís Apesteguia, ha destacado la vertiente económica del fenómeno y considera necesario dar prioridad a los residentes en los problemas de convivencia, algo que ha reivindicado como alcalde de Deià, municipio que tiene el doble de plazas turísticas que de habitantes.
Apesteguia considera necesario pedir responsabilidades al turista y al dueño de la vivienda que "tiene responsabilidad de lo que ocurre en su casa porque obtiene un beneficio económico de ello", o de lo contrario, "cuando se marchan los turistas que han estado 2 o 3 días, se diluyen y difuminan las responsabilidades".
Considera "especialmente interesante" que las sanciones contemplen la pérdida de la licencia que permite operar porque, dado que la función inspectora no basta, lanza un mensaje: "Si no eres capaz de asegurar que el alquiler turístico que ofreces no perjudica a tus vecinos, no lo puedes desarrollar".
La diputada del PP Salomé Cabrera considera la norma necesaria y ha abogado por coordinarla con la Ley de Actividades y con la normativa turística vigente, lo que "requiere diálogo y puestas en común con consells y ayuntamientos para obtener el mejor resultado y el mayor consenso".
Ha advertido de que estas fiestas pueden implicar riesgos de seguridad y tener impacto medioambiental, además de dañar la imagen del destino porque no contribuyen al modelo de turismo responsable que promueven las instituciones y el propio sector, por reflejar "un ocio descontrolado, basado en la clandestinidad".
El PSOE denuncia descontrol en el sector náutico
El PSOE ha denunciado "más descontrol y más accidentes que nunca" en el sector náutico y el litoral durante esta temporada estival. En la sesión plenaria del Parlament, el diputado Marco Guerrero ha criticado al consejero balear del Mar, Juan Manuel Lafuente, por limitarse a repartir una "guía de buenas prácticas".
Guerrero criticó la falta de control sobre actividades ilegales que ponen en riesgo el medio ambiente y la seguridad de las costas, incluyendo "fiestas descontroladas, playas ocupadas, carreras de motos acuáticas ilegales, vertidos fecales y fondeos descontrolados".
El diputado ibicenco afirmó que el conseller de la Mar debería ser más proactivo y no limitarse a acciones como la distribución de códigos de conducta. "Eso sería como decir que no hacen falta policías porque ya existe un código de circulación", ha dicho el diputado socialista.
Además, Guerrero reprochó al Gobierno del PP fomentar un clima de descontrol donde "la gente percibe que todo vale". El diputado ha concluido su intervención instinto a Lafuente en asumir sus responsabilidades y en colaborar con otras autoridades para afrontar los problemas de manera efectiva: "En los asuntos que puedan exceder el ámbito estricto de su competencia, colabore con las autoridades que sí las tengan. Y nos tendrá a su lado".