0-1. Un Ibiza práctico gana al Yeclano y encadena dos triunfos seguidos

Ibiza

El Ibiza vuelve a habituarse a ganar, algo que echaba de menos su afición por lo que ocurrió la temporada pasada en la segunda vuelta. Van dos victorias seguidas y a domicilio, algo que cuesta mucho lograr en esta categoría.

Esta tarde ha logrado los tres puntos en el campo del Yeclano, un equipo correoso, peleón, que aprieta mucho con sus armas, poca elaboración, mucho juego directo y en un estadio estrecho, 61 metros de ancho, ideal para lo que propone en los encuentros No ha sido un choque vistoso, han sobrado las imprecisiones por ambos bandos y ha costado mantener la renta mínima, con un Ibiza demasiado defensivo en el segundo tiempo, pero se ha logrado el objetivo. En partidos así, en los que cuesta generar juego, hay que saber competir y sobre todo poner el candado en tu portería.

El conjunto ibicenco, hoy de blanco, estrenando la tercera equipación, sigue concediendo demasiados centros laterales, sufre en las jugadas a balón parado, le cuesta encontrar a sus futbolistas más desequilibrantes en zonas en las que pueden generar peligro y sobre todo tiene fases en las que pierde control. Demasiados minutos en los que no encuentra pelota y defiende demasiado atrás, demasiados hombres dentro de su propia área. En esos momentos de apuro siempre aparece Ramón como salvador, porque el Ibiza esta campaña tiene un porterazo.

Pero si hay cosas por corregir, también se ven mejoras en el juego, los carrileros cada vez juegan más avanzados para ayudar a los centrocampistas, Jesús Álvarez es un muro en la zona ancha y los tres centrales aportan seguridad y solvencia atrás. Aunque lo más positivo hasta ahora es que se conceden pocas ocasiones a los adversarios, un gol recibido en tres encuentros y de penalti.

El Ibiza comenzó llegando al área de Iván Martínez, con tres centros en seis minutos aunque los locales reaccionaron rápido y Teddy en una contra obligó a Ramón a hacer la primera parada destacada. Pero el Ibiza volvió a tomar el control, estaba más cómodo sobre el césped y Gallar estuvo cerca del gol con un zapatazo desde la frontal sin dejar caer el esférico que salvó de manera espléndida el guardameta local Iván Martínez.

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Eran los mejores momentos de los visitantes, que se adueñaron del esférico que se pusieron por delante en una acción en la que tocaron y tocaron en el medio campo y el balón acabó en un costado a los pies del central Guillem que buscó un centro al área, la pelota tocó en un defensa del Yeclano y despistó a Martínez que no pudo hacer nada por evitar el tanto.

Con el viento de cara el Ibiza volvió a sufrir en los minutos finales del primer tiempo, cediendo la zona ancha, esa que Martí quiere gobernar más y mejor y volvió a crecer el Yeclano con un par de disparos que solventó sin problemas el portero ibicenco que estuvo providencial antes del descanso salvando un gol cantado tras un cabezazo franco en un saque de esquina.

El decorado cambio poco en la reanudación, el equipo local tenía la pelota y empujaba, y al Ibiza el balón le duraba un suspiro. Martí trató de corregir la inferioridad en la medular con la entrada de Domenech, que se estrenaba esta temporada, por un Gallar poco participativo, cuando el juego es más de músculo y brega. El Ibiza recuperar algo de protagonismo con el esférico en su poder, aunque seguía sin encontrar el camino para generar oportunidades..

Poco después se tenía que marchar Escassi lesionado dejando su lugar a Monjonell y también debutaba Quique que entró por Pau Ferrer, que tuvo poco protagonismo en el encuentro porque a los delanteros de la UD no les llegaron balones en condiciones.

No era día de florituras y el Ibiza jugaba con el reloj intentando que no pasara nada, mientras que los locales porfiaban, con cambios ofensivos durante el segundo acto pero sus intentos morían en las inmediaciones del área de Ramón sin generar ocasiones claras de gol.

Arturo Molina y Unai Medina fueron los últimos cambios de los ibicencos para aguantar el último arreón del Yeclano, que forzó saques de esquina y tuvo un par de disparos dentro del área tapados por la defensa o que no encontraron portería. En el Ibiza solo una acción clara de Arturo Molina que pifió el remate cuando estaba delante del portero en la única acción clara de los visitantes en el segundo tiempo.

Así se llegó al final de un partido con pocas florituras, aunque con tres puntos más en el zurrón.