Alquilar una habitación, comparar precios o no irse de vacaciones, medidas de las familias de Baleares para llegar a fin de mes
Hemos salido a la calle para conocer de primera mano la situación de las familias
Reportaje sobre las economías familiares en Palma
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Palma
Alquilar una habitación, comparar precios a la hora de hacer la compra, huir de los lujos o no irse de vacaciones. Son algunas de las maneras que los residentes de las Islas se ven obligados a llegar a final de mes. Los altos precios de los inmuebles y los alquileres por las nubes en el archipiélago merman la economía familiar de gran parte de la población balear. Hemos salido a la calle para conocer de primera mano la situación de las familias.
A las puertas de un supermercado en Palma, concretamente en Son Cotoner, nos encontramos con José Antonio, de unos 50 años. Autónomo, ahora mismo está de baja y cobra 700 euros. Su mujer trabaja y no tienen hijos. Asegura que es muy difícil poder ahorrar. Lleva tres bolsas con productos básicos. La compra le ha salido por unos 50 euros.
Pedro es jubilado. Reconoce que pueden vivir sin problemas económicos, pero lamenta que los alquileres están disparados.
Precisamente para hacer frente a los altos precios de los alquileres hay personas que acaban arrendando una habitación para seguir pagando. Es el caso de Suellen, con tres hijas pequeñas, que paga mil euros al mes y tiene una habitación subarrendada.
Carol tiene una hija. Su marido es quien trabaja, y pueden llegar a final de mes sin muchas dificultades. No tienen que pagar alquiler, pero aun así se fijan en los precios a la hora de hacer la compra. Cree además que muchas personas viven por encima de las posibilidades.
