1-0. El Ibiza atrapa al Castellón en el liderato

Ibiza

La UD Ibiza ha encadenado su tercer triunfo seguido tras imponerse al Recreativo Granada y suma tres puntos más que le permiten alcanzar en lo más alto de la clasificación al Castellón. El equipo celeste ha ofrecido una versión discreta, con un ritmo más pausado que en otras jornadas, con alguna de sus piezas claves tomándose un respiro y con las luces apagadas. La renta mínima ha permitido al equipo andaluz mantenerse vivo en el choque, ir creciendo y buscar las cosquillas al Ibiza, sobre todo en la segunda parte, cuando se ha ido al ataque con decisión y ha tenido cerca el empate.

Faena de aliño ibicenca adornada con chispazos de calidad, algunas ocasiones claras desperdiciadas, pero con un segundo tiempo en el que los celestes han estado muy desconectados, un equipo demasiado largo y concediendo demasiado, algo poco habitual. En esta categoría, cualquier rival te pinta la cara si juegas con una marcha menos o no estás acertado.

Había curiosidad en torno al once inicial, por si por una vez el entrenador local optaría, por las rotaciones, pero ya va dejando claro durante la temporada que no es muy amigo de los experimentos. Así que Gallar volvió a la titularidad tras su sanción y también Olabe en la medular. Las únicas modificaciones.

No tuvo mucha historia el arranque del choque con los ibicencos monopolizando la pelota, pero con una circulación lenta y con mucho pase en corto. Solo un par de desbordes por banda de los laterales con centro al área que no encontraron rematador. La solución para abrir la lata llegó como otros días en la estrategia. A los 18 minutos, una falta en la zona de tres cuartos favorable a los celestes la colocó medida Eugeni a la cabeza de Soko en el punto de penalti y el extremo camerunés, libre de marca, peinó a la red. Los once futbolistas del equipo andaluz estaban dentro del área y ninguno se acordó de marcar a Soko, un error de bulto que costó caro.

Con la renta mínima el Ibiza siguió con la misma dinámica, mucho dominio, poco ritmo y ahorrando esfuerzos. No fue el caso de Obolskii, que no entiende de eso, siempre derrocha energía. El delantero ruso es un espectáculo a la hora de proteger y bajar los balones aéreos cuando está de espaldas a la portería y no hay central que sea capaz de impedirlo. Las mejores ocasiones celestes en el primer tiempo fueron suyas, primero se le fue por un dedo un remate en la frontal, tras una gran jugada de Medina y después se topó con el poste tras un control en el área, el posterior rechace tampoco lo pudo aprovechar Medina que se topó también con la madera.

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El Recreativo Granada no generó mucho peligro en los primeros 45 minutos, tuvo muy poco balón,aunque generó un par de sustos, tras sendos despistes locales, pero Carlos Pérez no pudo aprovecharlos.

Tras el descanso, nada más arrancar el segundo tiempo, una gran maniobra de Soko no pudo aprovecharla Olabe en boca de gol. Parecía que los locales salían decididos a sentenciar, pero a medida que pasaban los minutos el Recreativo Granada empezó a tener posesiones más largas y a jugar en campo ibicenco, muy mejorados los andaluces con la entrada en el campo de Estacio y de Mortimer. Los encargados de generar juego en los locales no tenían su día, aunque Soko volvió a rozar el gol en un disparo desde la frontal que se le escapó a Tristán.

Sin embargo, el choque ya era de ida y vuelta, no estaba nada cómodo el Ibiza, incapaz de recuperar el mando del choque y el Granada dio dos avisos serios, con Rodelas muy cerca de lograr el empate, primero cruzó demasiado su remate y después se topó con Sequeira tras recorrer todo el campo.

Romo buscó más velocidad dando entrada a Suleiman por un desacertado Rubén Díez, pero también reforzó la medular, con la presencia de Tienza porque el Ibiza no tenía el control de la zona ancha y el balón merodeaba demasiado el área de Sequeira. Cedric entró por Obolskii y en los compases finales debutó Molina con la camiseta celeste.

Se mantuvo la emoción hasta el final, con llegadas peligrosas de los andaluces, y Sequeira en plan salvador evitando el empate. Los casi 3.000 aficionados que se dieron cita en Can Misses agradecieron el pitido final y celebraron un nuevo triunfo. Los puntos han sido lo mejor de un partido en el que los locales han jugado con fuego.