La mujer acusada de intentar matar a sus hijos en Manacor acepta 16 años de cárcel
“Mis hijos son lo que más quiero, no tener un techo de intentar protegerlos me llevó a cometer esta atrocidad” ha dicho la acusada en el turno de última palabra
Coche del Cuerpo Nacional de la Policía / Cadena SER
Palma
La mujer que envenenó a sus dos hijos menores en Manacor e intentó matarlos ha aceptado una condena de 16 años de cárcel. La mujer ha reconocido esta mañana en el juicio que se ha celebrado en la Audiencia Provincial que el pasado mes de mayo dio barbitúricos a sus hijos, una niña de 14 años y un niño de 4 y que después intentó asfixiar a la menor. En el turno de última palabra ha dicho, entre lágrimas, que su única intención era proteger a los niños porque se iban a quedar en la calle y que su condena va a ser estar sin ellos.
La mujer ha admitido que en la madrugada del 27 de mayo, les dijo a sus dos hijos que tenían que tomarse unas pastillas para los huesos. Los dos menores se tomaron las píldoras, que eran en realidad benzodiacepinas, y se sumieron en un profundo sueño. La niña de 14 años se despertó cuando notó que su madre le estaba tapando la nariz y la boca con los dedos y se despertó una segunda vez cuando estaba encima de ella con los brazos oprimiéndole el cuello. La menor de 14 años logró zafarse de su madre gracias a sus conocimientos de judo y logró evitar la asfixia. Habían pasado 24 horas desde que se habían tomado las pastillas. En el juicio se ha reproducido la declaración de la menor en el juzgado de instrucción. En ella explicaba que cuando su madre la estaba asfixiando no contestaba a sus peticiones de que parase.
La acusada ha aceptado una condena de 16 años de cárcel por un delito de homicidio en grado de tentativa y un delito de lesiones. Además, tiene prohibido acercarse a los dos menores a menos de 500 metros y comunicarse con ellos durante 12 años. Entre sollozos, ha lamentado lo que hizo. Ha explicado que se iban a quedar en la calle en pocos días y que la desesperación por proteger a sus hijos de la situación que se vivía en la casa que compartía con su expareja le llevó a cometer lo que ha calificado de atrocidad. La acusada ha dicho que su mayor condena será estar ahora separada de sus hijos y permanecer lejos de ellos. No ha dejado de llorar en toda la sesión. El juicio ha quedado visto para sentencia.
