Santiago Martín, arquitecto: "Por el precio que tenía en mente, con el local conseguí mucho más de lo que había en el mercado"

Palma

Santiago Martín ha convertido el viejo local de una panadería del barrio de Es Fortí en la casa que siempre había soñado. Llevaba tiempo buscando algo que se adaptara a su presupuesto de 240.000 euros y que le permitiera, sobre todo, tener un patio. No encontraba nada por ese precio, salvo pisos a reformar y con poco espacio exterior. Es arquitecto y después de mucho buscar, se planteó la posibilidad de comprar un local para acometer el cambio de uso. Explorando esa vía, dice, encontró posibilidades mucho más económicas que las que le ofrecía el mercado de la vivienda tradicional.

Dio con el local de una antigua panadería, en el centro de Palma. Es un espacio de 100 metros cuadrados con una terraza de 50 metros. Con el precio que él tenía de presupuesto podía comprar el local, hacer el cambio de uso y diseñar la casa a su gusto desde cero. Santiago compró el local contando ya con la licencia para realizar el cambio de uso. De hecho, consultó que cumplía todos los requisitos para hacer la conversión antes de adquirirlo. Afirma que en su despacho reciben entre dos y tres consultas al mes de personas que quieren comprar locales para poder vivir en ellos. Sin embargo, asegura que alrededor de nueve de cada diez peticiones formuladas al Ayuntamiento terminan denegadas porque los espacios no cumplen con los requisitos.