Organizaciones solidarias de Mallorca procuran un menú especial a los colectivos vulnerables para Nochebuena
Bien mediante una celebración en conjunto o con la entrega de comidas, las personas con menos recursos podrán vivir una festividad como toca
Imagen captada en un comedor social / Getty Images
Palma
Numerosas asociaciones y organizaciones solidarias de Mallorca tienen por objetivo intentar que esta Nochebuena sea especial para todos, independientemente de la situación económica que atraviese cada uno o de la compañía con la que vaya a contar. Mediante celebraciones especiales y entregas de menús navideños, los más vulnerables tendrán también la posibilidad de vivir una cena especial.
En el caso de Càritas Mallorca, preparan un menú especial en su comedor social de Inca, el cual se entregará a las 120 personas que habitualmente acuden a él. Noemí Estarás, portavoz de la organización en la isla, ha explicado que el comedor es pequeño y "solo podrán quedarse a cenar quienes no cenen en familia" y necesiten esa compañía propia de estas fiestas. "El resto podrá recoger la comida en una bolsa que se tendrá preparada o bien se las llevarán a casa los voluntarios de la organización", ha añadido.
Estarás ha apuntado que el perfil mayoritario de los usuarios actuales de este comedor de Inca es, junto a ancianos que viven solos, el de familias con niños.
Por otro lado, en la asociación Zaqueo, en Palma, catalogan este momento de "muy especial", tanto como el menú que ofrecen. Es una iniciativa que realizan cada año, aunque se mantendrá la estrategia de entregar los alimentos y no de reunirse en el comedor, un planteamiento adoptado con la llegada de la COVID.
Su presidenta, Catalina Cunill, ha afirmado que, al igual que en Càritas, alimentos como la porcella o los dulces propios de estas fechas no faltarán en cada bolsa. Junto a esta entrega, está prevista otra para el día de Navidad, también para la cena, para que los voluntarios puedan descansar y comer en familia.
Una tercera acción solidaria se lleva a cabo también en la asociación Es Refugi, que procurará hacer que este fin de semana sea especial para las personas que acogen y que, de hecho, viven allí. Todos hombres, los residentes en la asociación son de diferentes franjas de edad, entre los 18 y 75 años, y de nacionalidades distintas que están desempleadas, no tienen familia o han sufrido ejecuciones hipotecarias.
El gerente del centro, Toni Cañellas, ha explicado que el menú será diferente al habitual, con el carácter especial de la fecha, y que el objetivo es hacer una cena familiar, ya que, a día de hoy es lo que forman, una familia.
