Vuelven a casa los 23 niños ucranianos acogidos en Mallorca para huir de la guerra

Palma

Los 23 niños de la localidad ucraniana de Bucha que han sido acogidos en Mallorca vuelven a casa después de pasar un mes en la Isla. Esta acogida viene enmarcada en un proyecto desarrollado por el Institut Mallorquí d'Afers Socials y que tiene como objetivo alejar a los niños de la guerra a través de actividades de ocio, amistades estivales y momentos inolvidables con sus familias de acogida. En total, el proyecto ha costado 150 mil euros y han colaborado hasta 15 familias.

Nueva familia, nuevas caras y nuevo entorno. Con estas condiciones es normal que un niño refugiado de una guerra le cueste un poco más abrirse a una nueva familia de acogida, aunque sea solo para un mes. Al menos así lo piensa Antonio Martínez tras acoger a Bohdanna, una niña de diez años procedente de la zona bélica de Bucha. A pesar de que al principio evitaba lo más que podía el contacto con su familia de acogida durante los primeros días, Martínez declara que las últimas semanas la comunicación y su relación ya eran mucho más cercanas.

En esa línea, la directora insular de infancia y familia, Mari Ángeles Fernández, ha destacado la importancia de este programa como parte de un proceso de curación de traumas y de encontrar un lugar que genere seguridad en los niños que los aleje de las duras condiciones de su vida en Ucrania.