"Ver esta actuación maravillosa en Gijón me ha despertado muchas cosas, sigo teniendo muchísimos sueños"

Gijón

El de Gijón en la Escuela Superior de Arte Dramático de Asturias ha sido el último acto en la agenda de Meryl Streep hasta la ceremonia de entrega de los premios ya el viernes por la tarde en el Teatro Campoamor. La actriz estadounidense salía del pequeño teatro del que dispone la ESAD emocionada y cargada de la energía que le ha ofrecido esta futura nueva generación de intérpretes que han creado para ella un montaje salpicado de varias escenas del teatro español más representativas.

Ante la atenta y muy expresiva mirada de Streep, 19 alumnos representaban varios textos de 'La casa de Bernarda Alba', de Federico García Lorca, 'La vida es sueño', de Calderón de la Barca, 'Don Juan Tenorio', de José Zorrilla, y 'El Caballero de Olmedo', de Lope de Vega. Y otros más actuales con fragmentos del dramaturgo Juan Mayorga, quien el año pasado recibió el Princesa de las Letras. Uno de los momentos más memorables en la interpretación llegó con la escena de 'Doña Rosita la soltera', interpretada a dos voces, ya que una de las alumnas se apoyaba en una grabación de Núria Espert con la misma escena. La actriz por cierto fue galardonada en la categoría de las Artes en 2016 y ahí comenzaba la relación de la ESAD con la Fundación Princesa de Asturias.

Acompañada por su hermano y la presidenta de la Fundación Princesa de Asturias, Ana Isabel Fernández durante la representación, la actriz no dejó de disfrutar de un montaje creado exprofeso para la premio Princesa de Asturias de las Artes se salpicaron guiños a la actriz que ella respondió con gestos de complicidad, como un momento en que se lanzan a cantar Mama Mía. "Quizá el público en general no los haya pillado pero ella si los sabe", los detallaba Beatriz Quirós, profesora de la ESAD, interprete y coautora del espectáculo, "por ejemplo cuando me preguntan en el casting por las habilidades, algo que decían los compañeros de ella siempre es que hacía deliciosos suflés, blandía la espada como Errol Flynn o hacía saltos mortales" y concluye "es que se le da bien todo".

A la pregunta de los alumnos sobre si seguía teniendo sueños la actriz respondía un rotundo sí como relataba quien ejerció de traductora "ver esta actuación maravillosa en Gijón me ha despertado muchas cosas, ha sido maravillosa, los actores han puesto todo su corazón en el escenario", y continuaba "siempre decimos que actuar en teatro es como hacer una escultura en la nieve y sí tengo muchísimos sueños".

Rompiendo el protocolo se abrazó a los alumnos, e incluso a un pequeño de 10 años, que resultó ser el hijo de Beatriz Quirós con grandes aspiraciones como director ya a su corta edad, absoluto seguidor de sus películas, que le ofreció una fotografía para conseguir su autógrafo que ella no dudó en firmar.

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Meryl Streep está considerada como una de las mejores actrices contemporáneas. Lo reafirman los galardones que ha ido recibiendo a lo largo de más de cuarenta años de carrera. Tres premios Oscar, ocho Globos de Oro, dos BAFTA y tres Emmy, pero eso no es nada considerando que la estadounidense posee el récord absoluto de nominaciones a los premios Oscar (21) y Globos de Oro (32) y es una de las dos actrices vivas que ha logrado el galardón de la academia en tres ocasiones; por Kramer contra Kramer, la Decisión de Sofie y por la Dama de Hierro en el Papel de Margaret Tacher.