“Sois unos hijos de puta y os voy a rajar”: afronta siete años de cárcel por apuñalar al hombre con el que jugaba a las cartas
La acusación sostiene que la zona a la que dirigió el ataque generaba un elevado riesgo de muerte si no se hubiera realizado el tratamiento adecuado en tiempo y forma

Playing cards on a wooden table. / Thomas Winz

Gijón
La Fiscalía solicita siete años de prisión para un hombre acusado de intentar matar a otro con el que con el que jugaba a las cartas en una cafetería de Gijón y al que asestó una puñalada en el cuello, según refleja el escrito de calificación provisional trasladado a la Sección Octava de la Audiencia Provincial, con sede en Gijón, que asumirá el desarrollo del juicio.
Los hechos ocurrieron sobre las 21:00 horas del pasado 6 de abril en el interior de un establecimiento hostelero situado en la calle Fuente del Real de Gijón, donde el acusado inició una discusión con la víctima, de 36 años, y, cuando ambos estaban fuera del local y “con ánimo de acabar con la vida” de la víctima, le agredió causándole varias lesiones, entre ellas la sección parcial de la cara anterior de la vena yugular interna, que precisaron una intervención quirúrgica urgente.
La acusación sostiene que la zona a la que dirigió el ataque generaba un elevado riesgo vital por lo que podría haber llegado a provocar la muerte si no se hubiera realizado el tratamiento adecuado en tiempo y forma.
Posteriormente, el procesado se acercó con una navaja de unos 11 centímetros de hoja a la puerta de entrada de su domicilio cuando acudieron los agentes a detenerle y les espetó: “No tenéis huevos a entrar, sois unos hijos de puta y os voy a rajar”, a la vez que movía de un lado el arma, que dirigió hacia ellos, aunque finalmente lograron detenerle.
La Fiscalía imputa al acusado sendos delitos de homicidio en grado de tentativa y resistencia grave y pide una pena de siete años de cárcel y una orden de alejamiento de la víctima a menos de 500 metros y otra de comunicarse con él, en ambos casos por un periodo de nueve años. Por el segundo delito la acusación solicita ocho meses de prisión y libertad vigilada durante nueve años así como una indemnización a la víctima de 6.460 euros por lesiones, secuelas y daño moral y una indemnización al Servicio de Salud del Principado de 1.504 euros por los gastos médicos ocasionados.