El deterioro del debate político

Asturias

Les confieso que no deja de asombrarme – también podría decir cabrearme- los derroteros por los que transita en la mayor parte de las ocasiones el debate político.

Hasta hace un tiempo, los distintos partidos debatían la posición sobre un asunto en el seno de órganos en los que estaban representados y, después, lo manifestado en ellos se trasladaba, con mejor o peor fortuna, a los medios. Desde hace un tiempo me parece que el orden se ha alterado. Se comunica en primer lugar la opinión a los medios o se difunde en las redes sociales y a continuación en los órganos apenas si se debate. Parece que una vez hechas las correspondientes declaraciones, lo que puede acaecer en ellos carece de interés. Y así van las cosas… entre todos contribuyendo al deterioro de la política, al sustraer el debate del marco donde debería desarrollarse, sustituyéndolo por declaraciones apresuradas generalmente poco rigurosas e informadas o por meras frases hechas publicadas en las redes.

Puedo estar equivocada pero me parece que para opinar sobre un asunto es preciso antes conocerlo, que en el debate deben manejarse razones y argumentos, que se debe respetar al órgano del que forma parte y remitir el debate fundamentalmente a su seno. Entiendo que la democracia debe cuidarse y ello implica, entre otras cosas, respeto a las instituciones a las que se pertenece.

Para ser justa, debo decir que la responsabilidad no recae exclusivamente en las personas que forman parte de estos órganos; que, a su vez, se ven presionadas por la demanda de opinión inmediata sobre temas muy variados y condicionadas por la dificultad de reconocer el desconocimiento sobre un asunto o la necesidad de recabar más información… en definitiva se espera de ellas opinión rápida, contundente y acabada.

Pero me parece que hacen mal sucumbiendo a esa presión porque en ese terreno solo se mueven bien los charlatanes y los que confunden la sede de nuestras instituciones con un plató de televisión.

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Con más rigor, razones y argumentos tal vez nos iría mejor.