La Ley de Calidad Ambiental enfrenta al gobierno con IU, sus socios de investidura

Oviedo

El progresivo distanciamiento entre el PSOE e IU como socios de investidura –o de legislatura- se ha escenificado este martes en la Junta General, durante la última sesión de control al gobierno en el actual período de sesiones. Ha sido a cuenta de la tramitación de la Ley de Calidad Ambiental, muy cuestionada tanto por IU como por Podemos y sobre la que a bocajarro ha preguntado al Gobierno el diputado Ovidio Zapico. Primera pregunta: "¿da por roto el acuerdo con Izquierda Unida por la posición de esta fuerza política frente a la influencia de lobbies en el contenido del proyecto de ley de Calidad Ambiental?" Y segunda pregunta del de IU al gobierno: "¿da por roto el acuerdo con Izquierda Unida por la posición de esta fuerza política frente a la influencia de lobbies en la actividad y las decisiones del gobierno de Asturias?"

Zapico asegura que el gobierno se aparta del espíritu que orientó el pacto de investidura y que se ha echado en brazos de Ciudadanos, al que describe como correa de trasmisión de los grandes lobbies empresariales supuestamente beneficiados de los términos de la nueva ley de calidad ambiental. Donde el gobierno ve agilidad en los trámites, IU adivina permisividad y desprotección del medio ambiente.

El videpresidente del gobierno y consejero de Administración Autonómica, Medio Ambiente y Cambio Climático, Juan Cofiño niega la mayor y asegura que IU vive en un realidad paralela y que es la coalición la que ha optado por virar hacia la izquierda que, por contraposición al gobierno, destruye, en lugar de construir. Ha echado mano de un artículo periodístico de hace tres años sobre uno de las multinacionales que supuestamente integra esos lobbys beneficiados por la nueva legislación ambiental, Dupont.