Reconocimiento colectivo
El comentario de Ana Castaño en 'La Ventana de Asturias' (23/06/22)
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Asturias
Sobre una alfombra roja se exhibieron en la plaza del Ayuntamiento de Xixon las nuevas motos con las que patrullara la policía comunitaria.
Esta semana las motos, la semana pasada los policías en el mismo lugar se manifestaron contra el gobierno local y su jefatura.
Sobre la calidad de las motos no voy a opinar.
Sí quiero hablar sobre la oposición que la platilla mantiene a que el edificio que pasaran a ocupar sea compartido con otros departamentos municipales. Se equivocan si entienden que el edificio –la obra ronda los 10 millones a los que se deberá sumar el coste del equipamiento - les pertenece. El edificio que se levanta en el Polígono es del Ayuntamiento y son los responsables municipales los que deben procurar su mejor aprovechamiento.
No obstante no es de extrañar la reivindicación de uso exclusivo del edificio; parte de la platilla, no quiero generalizar, entiende que forman parte de un grupo especial y mejor que el formado por el conjunto de empleados/as municipales. Esto se ha alimentado desde el propio Ayuntamiento. Vayan dos sencillos ejemplos: al acceder al empleo se les organiza una recepción especial de bienvenida o su festividad se celebra con la presencia de todas las autoridades.
Quizá estén pensando que la policía municipal desempeña una labor importante y por eso debe ser tratada de manera singular, pero otras trabajadoras –utilizo al femenino porque son colectivos altamente feminizados- como las educadoras infantiles o las trabajadoras sociales realizan un trabajo valioso sin que por eso sean objeto consideración especial y singular.
Lo que sucede en Xixón no es algo muy distinto a lo que pasa en otras muchas las ciudades, en las que los policías municipales forman un grupo cohesionado, en el que los sindicatos corporativos suelen tener especial implantación y que ejerce una continua presión para obtener demandas propias.
Harían bien desde el Ayuntamiento en tomar nota de estos problemas y fomentar prácticas que pongan en valor el compromiso con el servicio público y reconozcan la aportación al bien común del conjunto del personal municipal.
