El bombero que encabezó el rescate de los 3 muertos en el Moncayo: “Era una imprudencia, no era el día para hacer montaña”
El oficial del SPEIS de Tarazona de la Diputación de Zaragoza, Javier Ibáñez, narra la complejidad de este rescate debido a las adversas condiciones meteorológicas
Zaragoza
Subir al Moncayo con la extrema situación de frío y nieve era una imprudencia. Es la valoración que ha hecho en la Cadena SER el oficial de los Bomberos de la Diputación de Zaragoza que encabezó el rescate de los tres montañeros fallecidos en este parque natural.
Estos excursionistas formaban parte de una asociación de montaña madrileña y tenían edades comprendidas entre los 63 y 65 años. Partieron desde la cara soriana del Moncayo, concretamente de Cueva de Ágreda. Los cuerpos están desde ayer en el Instituto de Medicina Legal de Aragón, el IMLA, en la capital aragonesa.
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Una sensación térmica de menos doce grados, niebla, ventisca y nieve. Es lo que se encontraron estos especialistas cuando recibieron el aviso del accidente en la zona conocida como 'La Escupidera', un circo glaciar muy peligroso en estas fechas. El helicóptero no pudo acceder hasta este punto y tuvieron que hacerlo a pie desde el Santuario.
El oficial del SPEIS, Javier Ibáñez, del parque de Tarazona, ha explicado que, cuando ascendieron hasta este punto, "se encontraron a dos personas que les dijeron que habían escuchado a gente gritar". Después, hallaron a las tres personas heridas, dos todavía con vida y un tercero ya fallecido.
No pudieron hacer mucho por ellos. Las lesiones eran casi fatales. "Buscamos las constantes de los dos montañeros todavía con vida y los tapamos por el frío. Había una sensación térmica de menos doce grados y mucha ventisca", ha explicado.
Tras esto, se incorporaron más compañeros de Bomberos de la DPZ y efectivos de la Guardia Civil que trajeron también un médico que no pudo hacer otra cosa más que certificar la muerte de los tres excursionistas.
Este especialista en montaña lo tiene claro: no deberían haber subido al Moncayo con esas condiciones climáticas.
"Es imprudente subir en esas condiciones para hacer turismo o según que actividades. No estaba el día, nos encontramos con mucha gente experta que se dio la vuelta por el tiempo. Había un viento de 60-70 kilómetros hora. No era el día para hacer montaña", ha explicado.
Un rescate que fue también muy peligroso para los especialistas. "Tuvimos que hacer una cabecera en el hielo para poder descender a los cuerpos. La situación era muy peligrosa y podríamos haber tenido un accidente".
