Médicos y enfermeras de la provincia de Teruel muestran su preocupación por las consecuencias que puede tener la reforma de la atención primaria que proyecta el Gobierno de Aragón
Por el momento no se han producido dimisiones en ninguno de los equipos directivos de las diferentes áreas de salud


TERUEL
Pero están alerta y observan con la máxima inquietud las consecuencias de un decreto que no ha sido negociado. "Tal y como esta la situación en Teruel, no echemos sal en la herida porque se trata de hacer las plazas atractivas", decía el portavoz del Sindicato Médico, Paco Rodilla.
También, Mariano Lozano, portavoz del sindicato Fasamet, no descarta que el cambio de las reglas de juego para médicos y enfermeras provoquen situaciones como "que un médico del Centro Salud Ensanche, podrían dedicarlo a hacer guardias en Utrillas o Mosqueruela".
En la provincia de Teruel la situación más complicada es la que el decreto prevé para Médicos de Atención Continuada y Enfermeros de Atención Continuadas que además están siendo plazas de difícil cobertura. Según explicaba el portavoz de Fasamet, "van a verse obligados a hacer guardias sábados, domingos, festivos, esto cambia las reglas de juego y afecta a todos los centros de salud".
Según han explicado los portavoces de ambos sindicatos médicos, en la provincia no se ha registrado ninguna dimisión de equipos directivos de atención primaria, aunque no descartan que puedan producirse si no cambia el decreto.
El sindicato Cemsatse ha convocado diferentes medidas de presión para los próximos días. El domingo, 16 de marzo, tendrá lugar una manifestación en Zaragoza y el día 20 concentración del personal en la puerta de los Centros de Salud de todo Aragón. Estas medidas dependen de la negociación que el Gobierno de Aragón mantiene hoy con los sindicatos médicos y mañana con Cemsatse.