Entra en prisión provisional el acusado por la muerte en Biescas
D.G. es acusado de homicidio. Alegará que las heridas que acabaron con la vida de su vecino fueron en defensa propia
Biescas
El acusado por la muerte de J. A.E., de 48 años, nacido en Huesca pero vecino de Biescas desde hace años, ha entrado en prisión provisional, comunicada y sin fianza este martes por la noche. Aconsejado por su abogado, no ha declarado ante la jueza del juzgado de Instrucción n°2 de Jaca, que inicia ahora las diligencias para esclarecer el presunto homicidio.
El acusado, D. C., de 37 años y con nacionalidad rumana, entraba a los juzgados con moratones en su cara y una venda en su mano derecha. Vivía en Biescas desde hace un tiempo y trabajaba en el sector de la hostelería.
Alejandro Sarasa, abogado del acusado
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La defensa del acusado alegará, según explicaba su abogado, Alejandro Sarasa, legítima defensa. Argumenta que el ahora fallecido bajó al piso de su vecino con un cuchillo en actitud violenta, y que cuando éste le abrió la puerta, le propinó un puñetazo al acusado, que se encontraba "semidesnudo y bebido, escuchando música alta". Fue entonces cuando, según el relato del acusado, comenzó un forcejeo entre ambos. Hay arma blanca intervenida, "habrá que ver si hay más de un adn y ello delimitará si hubo forcejeo", añadía el abogado defensor del acusado. Pone de relieve la intención de su cliente de entregarse voluntariamente a la Guardia Civil nada más ocurrir los hechos.
Algunos vecinos de la localidad hablan de una mala relación vecinal entre ellos, algo que el acusado contaba a su abogado. Le manifestó que habían tenido disputas vecinales "pero sin gravedad (...) de hecho mi acusado no tenía antecedentes penales y nunca había sido detenido."
El fallecido, que responde a las siglas J.A.E., tenia 48 años y vivía en Biescas desde hace años, donde había trabajado como panadero. Vivía con su perro en el segundo piso del inmueble número 14 de la calle Esperanza de Biescas. Su entierro estaba previsto este miércoles en la capital oscense, pero al parecer se tuvo que retrasar a la espera de la declaración del acusado.
La jueza del Juzgado de Instrucción de Jaca ha decretado secreto de sumario.