El Huesca se tiene que conformar con un agridulce empate ante el Almería

Huesca

Aunque el punto es bueno y más ante un rival como el Almería, la realidad es que la Sociedad Deportiva Huesca mereció más en un partido en el que pasaron muchas cosas. Primero Juan Pérez detuvo un penalti a Luis Suárez a los 3’ minutos, luego Unzueta marcó el 1-0 para los locales en el 8’. En la recta final del primer tiempo fue expulsado de forma rigurosa Diego González y eso que el VAR llamó a Arcediano Monescillo para que rectificara, pero mantuvo su decisión. Con un hombre menos los de Antonio Hidalgo marcaron de penalti el 2-0 en el 56’, señalado tras revisión también del VAR y luego llegó la reacción de los visitantes con los tantos de Arribas en el 82’ y de Centelles, un golazo, en el 85’ que dejaron sin el premio del triunfo a un Huesca que se vació en el terreno de juego y mereció ganar.

Fue un encuentro muy intenso y donde la lluvia acompañó durante todo el choque. El Almería llegaba en racha y el Huesca mermado porque a las bajas de Dani Jiménez, Hugo Vallejo, Joaquín y Kortajarena se sumaron las de Gerard Valentín y Loureiro, todos ellos jugadores muy importantes en los esquemas de Hidalgo.

La novedad en el once fue ver a Diego González de mediocentro defensivo y Unzueta volvía a la punta de ataque y marcó su primer gol con la camiseta azulgrana e incluso le hicieron un penalti que el colegiado no señaló, dentro de los despropósitos de toda la tarde de Arcediano Monescillo y muy similar al que pitó por agarrón de Toni Abad y Melero y que detuvo Juan Pérez a Luis Suárez a los 3’ minutos de partido.

Con el Huesca haciendo un buen encuentro de presión y maniatando a los almerienses que no se encontraban cómodos en el terreno de juego se llegó al minuto 39’ con la expulsión de Diego González por una entrada que solo el colegiado interpretó que era roja. El VAR se lo advirtió, pero se ratificó y el Huesca jugó con uno menos hasta el final.

En el segundo tiempo se esperaba un partido complicado, a pesar de ir por delante, pero de nuevo el VAR advirtió a Arcediano Monescillo de una mano que no vio de un defensor visitante y pitó penalti que transformó Vilarrasa en el 2-0 en el minuto 56’.

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Pasaban los minutos y el Huesca se desgastaba físicamente y sin poder tirar de fondo de armario. Fueron entrando Jordi Martín por Unzueta (en el descanso) y luego Javi Mier por Javi Hernández, Ayman por Soko y al final Hugo Anglada por Javi Pérez.

Mientras tanto el Almería metió artillería pesada con Arnau, Arribas, Centelles, Marc Pubill y Rachad. Precisamente Arribas en el 82’ y Centelles en el 85’ firmaron los dos goles que dieron el empate a los de Rubi.

El Huesca fue despedido con una gran ovación por el partido que había hecho. Mermado por las bajas, con un hombre menos y apoyado por un Alcoraz volcado se consiguió por lo menos sumar un punto y ya tiene 18 en la clasificación, aunque dio la sensación de que se quedaron dos por el camino.

Antes de empezar fue homenajeado Gonzalo Melero, el exazulgrana, que junto a Rubi volvía al escenario en el que fueron protagonistas del histórico ascenso a Primera División.