Advertencia de Rubi: "No nos vamos a entregar"

SER Almería

No le queda otra que lanzar mensajes de optimismo en el análisis de una derrota que vuelve a alejar al Almería de su objetivo principal. Dice Rubi que han entrado en esa fase del campeonato donde cada error se magnifica y sus rivales con poco le hacen gol. Por unas circunstancias u otras, la segunda vuelta se ha convertido en una pesadilla y ya solo quedan diez jornadas para que se decida el ascenso y las cuatro plazas de Play Off. Por clasificación y sensaciones, los rojiblancos no están ahí y el margen es escaso.

Por mucho que lo trabaje e intente meter en acción a su plantilla, a Rubi se le atragantan los inicios y si en Eibar encajó a los cinco minutos, en El Plantío fue en el ocho y lo que es peor, la jugada de Marcelo viene de un saque de banda: “Malas sensaciones en dos facetas. Una encajar tan pronto otra vez cuando no habíamos sufrido situaciones de peligro; y luego a partir del 2-1 porque el equipo quedó demasiado chafado. Hasta ese gol hicimos un partido más que correcto, generando ocasiones, pero estamos en esa fase de la Liga en la que los rivales con muy poco, y no quiero desmerecer al Burgos, nos marcan. Menos oportunidades no se nos pueden hacer. Faltó efectividad para ponernos por delante”.

No arroja la toalla

Según se den los marcadores de la jornada el Almería puede acabar a nueve puntos del ascenso directo quedando treinta en disputa. Pero hablar de Primera es una utopía entre tantas decepciones y pocas alegrías. El técnico reconoció en sala de prensa que todavía le quedan muchas cosas por pelear: “No nos vamos a entregar y lo hemos hablado con los futbolistas. Tenemos cosas a recriminarnos. Son 30 puntos para el final y seguiremos intentándolo. No fuimos capaces de ganar ni vamos a perder la cabeza. Hablamos dentro y no vamos a tirar la toalla. Seguiremos empujando para forzar al máximo la situación”.

No se esperaba el gol de Fer Niño ni tampoco una caída en picado del rendimiento de sus jugadores a raíz de esa acción. La mochila que llevan detrás se cargó de peso porque se vieron con la posibilidad de remontar y el segundo del Burgos aniquiló las esperanzas de llevarse incluso un punto de El Plantío: “No nos vamos a engañar. Nos hemos atascado fuera de casa. No creo que haya falta de confianza en el vestuario y sabíamos que en Burgos habría brega y lucha. Sí que puedo recriminar que no te puedes hundir con el 2-1. Todo pesa un poco más. Esto es fútbol profesional y los golpes vienen como vienen. Contra el Levante se volverá a ver a un buen Almería”.