El Westmorland atraca en Málaga tres siglos después
El Westmorland atraca en Málaga tres siglos después
04:27
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1731070981087/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Málaga
En el siglo XVIII ya existía la idea de la beca Erasmus, pero solo era para ricos. Se llamaba el Grand Tour y era un viaje por Europa (Francia e Italia principalmente) que hacían los niños ricos ingleses al terminar sus estudios. Año y medio viajando, pasando meses en ciudades como Roma donde encargaban retratos con vistas de la ciudad, verdaderos selfies para mostrar donde habían estado. No solo encargaban retratos, también compraban esculturas, pinturas, grabados y hasta partituras musicales con la que decorar las mansiones en las que vivirán cuando hereden el título nobiliario de la familia y su fortuna. Según iban comprando, empacaban en fardos que iban enviando en cargueros hacia Inglaterra.
Uno de esos cargueros era el "Westmorland", un buque que salió de Livorno (Italia) y fue apresado por fragatas francesas a principios de 1779 , que decidieron traer a Málaga y descargar toda su mercancía. Las obras de arte quedaron en un almacén y se hicieron lotes para venderlos pero llegó a oídos de Carlos III la valiosa carga de arte que envió a comprarla al Conde de Floridablanca. Una compra destinada a servir de modelo a los alumnos de la Real Escuela de Bellas Artes de San Fernando en Madrid donde, desde su compra, fue depositado. Ahora parte de esa carga, las obras más destacadas, han vuelto a Málaga en las Salas de la Fundación Unicaja de Málaga que mantiene en el Palacio Episcopal de la ciudad.
Destacan unas preciosas esculturas de mármol de Bartolomeo Cavaceppi del mito de Eros y Psique y el de Baco y Ariadna, una acuarelas de John Robert Cozens nunca expuestas y que conservan sus colores originales o múltiples grabados de Piranessi. Una historia muy curiosa e interesante, que te lleva al modo de vivir de la élite inglesa de la época y a las obras de los artistas más importantes de la Italia del siglo XVIII. Merece nota aparte, una nota alta, la museografía exquisita donde poder ver muchas de las esculturas en los 360º y con QR que te llevan a videos donde ver los libros enteros de grabados que obviamente solo pueden ser expuesto por una de sus páginas. Incluso hay un QR que te lleva a un video donde escucharás tocar algunas de las partituras de música expuesta. La exposición se puede ver hasta el 12 de enero. Ya puedes escucharlo.