Un pedófilo de Sevilla evita la cárcel tras el acuerdo de conformidad entre las partes
Ha sido condenado a tres años de prisión por tenencia y distribución de pornografía infantil
Un agente de la Policía Nacional revisa uno de los teléfonos móviles incautados en una operación internacional contra la pedofilia. / Policía Nacional
Se llama José. Y en 2020 la Policía encontró en su casa más de 30 mil archivos pedófilos, unos activos y otros borrados pero recuperables. Estaban en diferentes dispositivos y contenían imágenes de menores desnudos o escenas sexuales explícitas. Un acuerdo de conformidad entre las partes evita que entre en prisión. La Audiencia de Sevilla lo ha condenado a tres años de cárcel por un delito de tenencia y distribución de pornografía infantil con las atenuantes de alcoholismo y dilaciones indebidas. También a cinco años de inhabilitación especial para cualquier profesión u oficio que conlleve contacto con menores de edad.
No ingresará en prisión siempre que no vuelva a delinquir en tres años y que realice un curso de formación en educación sexual. Además cada seis meses deberá presentar un informe del centro que lo está tratando.
Según declara probada la sentencia, en el verano de 2019 el acusado descargó y compartió archivos con contenido sexualmente explícito de menores de edad a través de un equipo del que era titular y cuya conexión se ubicaba en su domicilio de Sevilla. Para ello, utilizaba el programa eMule' porque sabía que era idóneo para la obtención y puesta a disposición de otros usuarios de los archivos.
En el domicilio del acusado fueron intervenidos varios equipos de su propiedad y uso exclusivo con los archivos pedófilos.
