La FEPAC pide que se rotule una calle en honor a Los Revivíos
Es un homenaje a la agrupación pionera en el restablecimiento del Carnaval de Morón, que se produjo en 1979
La murga Los Revivíos
Morón de la Frontera
El Foro de Expertos, Peñas y Agrupaciones del Carnaval de Morón, FEPAC, ha registrado en el ayuntamiento de Morón de la Frontera una petición para rotular una calle en honor a la murga Los Revivíos, la agrupación pionera en el restablecimiento del Carnaval de la localidad, que se produjo hace casi medio siglo, en 1979.
Con la restauración de la democracia en España se recuperó la fiesta del Carnaval en Morón de la Frontera por iniciativa de un grupo de ciudadanos —músicos no profesionales, jornaleros, poetas, aficionados flamencos— conscientes del arraigo popular, el valor histórico y social que esta fiesta tuvo en la ciudad del Gallo.
Finalizaban los setenta cuando Los Revivíos recorrieron de nuevo las calles de Morón cantando a la democracia en libertad. Desde entonces, han transcurrido cinco décadas de agrupaciones, comisiones organizadoras, coplas, festivales, disfraces, pasacalles y actividades carnavalescas que convierten nuestro pueblo, cada febrero, en un gran escenario público y abierto a la carnalidad, la alegría, la picaresca y la crítica social, la expresión desde la música y el canto de la idiosincrasia moronera.
La aceptación ciudadana del Carnaval —que es mucho más que una fiesta— ha alcanzado en nuestro municipio un nivel muy alto, como prueba la innumerable cantidad de agrupaciones que se han formado desde aquella primera (cuyo espíritu se ha mantenido en las demás), su permanencia temporal, la participación social en el multitudinario pasacalles de disfraces o la concurrencia al baile de máscaras, que hacen del Carnaval moronense un acontecimiento singular con un relieve poco frecuente en Andalucía.
Sin el impacto de Los Revivíos y su grito, tan esperanzador como sencillo y sentido, de «Y que pa el año que viene, en vez de una murga haya una hartá», el Carnaval de Morón no habría resurgido con la fuerza arrolladora que lo ha mantenido vivo hasta nuestros días.
Antonio García «Cajita» tuvo un lugar especial para el nacimiento de Los Revivíos en su pregón de 2019: «A la primera reunión de 1979 asistieron por lo menos 40 personas, que ya después se fueron cayendo del cartel, por eso de tener que ensayar a diario, o por la temática de algunas letras frente a la censura y los problemas que todavía amenazaban la libertad de expresión.
Comenzaron a montar el repertorio apenas mes y medio antes de febrero, en un local de la calle Río Pisuerga, lateral y anexo a la Iglesia de la Victoria. Quedaron en salir con el acertado nombre de Los Revivíos. En el tipo, los colores de la bandera andaluza que por entonces buscaba su autogobierno reivindicando la ansiada autonomía.
Y llegó febrero y se echaron a la calle. En la puerta del local los esperaban varias furgonetas de policía con fusiles en posición de prevengan. Lejos de amilanarse, desde la Victoria iniciaron un pasacalle sin más armas que pitos de caña adornados con cintas de colores en la mano y un abanderado abriendo el desfile con la blanquiverde».
Los Revivíos, por tanto, sembraron la semilla pura y auténtica, cuyo fruto —para honor del viejo Mawror— no tardó en germinar. Es por ello, y porque la memoria debe ser justa y agradecida con su legado histórico, este germen carnavalero que allanó el camino hacia el progreso debería quedar inmortalizado con todo merecimiento en el callejero local, denominando como Los Revivíos la actual calle Río Pisuerga, pues de su vientre brotó y vio la luz —porque no se puede detener la primavera— la primera agrupación del Carnaval contemporáneo en Morón de la Frontera.
