Un recorrido fotográfico

Jerez de la Frontera

Desde que tengo uso de razón recuerdo mi gusto por las fotografías; en particular por las de papel. En casa siempre ha habido numerosos álbumes y, pese a que han visto reducido considerablemente su número, algunos son posteriores a la irrupción de la cámara digital. También siempre ha habido, y hay, bastantes fotografías enmarcadas; aunque en este caso, y en su mayoría, es el papel el que ha sobrevivido a su soporte.

Son las instantáneas las que, cuando menos en mi caso, marcan la diferencia. Las naturales, las espontáneas, los a veces llamados `robados´ (o casi)…; esas que realmente traen a tu memoria y a tu corazón a la persona o personas que estuvieron contigo en aquellos lugares y en aquellos precisos momentos: sus gestos; miradas; su conversación... Algunas te retrotraen de tal modo que incluso te permiten reproducir e hilar aquella especial reunión, aquel especial viaje, aquel especial lugar, o aquel día en que sencillamente celebrabas que “hoy es hoy”.

No pocos días cojo un álbum al azar para revisarlo, o bien porque estoy quitando polvo y me paseo sin prisas por su contenido; o bien opto por hacerlo desde el ordenador, habitualmente durante las tardes. En ambos casos, podría estar horas sin cansarme; ¡me encanta!

Pero todos los días, casi sin excepción, mi mirada hace lo propio con las enmarcadas; según lo que dicta mi pensamiento o mi estado anímico, me detengo en algunas de ellas…, y `ahí me quedo´ un buen rato. Probablemente, no sean las mejores estéticamente hablando; con seguridad puedo también decir que no están todas las que son. Pero cada una de ellas es única y es por eso por lo que tienen un lugar reservado y propio en casa. Y a través de la alegría, la tristeza, o de las dos, ese personal recorrido fotográfico siempre supone un impulso que Reconforta y catapulta a mi alma.

Permítanme que les deje para, precisamente, hacer hoy uno de esos recorridos. No sería extraño que de alguna manera, directa o indirectamente, pueda encontrar las vivencias con algunos de quienes en este momento tienen la amabilidad de escucharme.

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Gracias y un saludo.

COVADONGA TRAVERSO BLANCO