El juez ordena pagar 21.381 euros al dueño del bar La Esperanza cerrado por los daños causados por las obras de un hotel
La cuantía viene derivada de la medida cautelar por "daños y perjuicios" establecida en 2020 para abordar las obras de un hotel y que obligaron a la paralización del negocio
Cadena SER
Sevilla
El Juzgado de Primera Instancia número 19 de Sevilla ha resuelto que la empresa Doble G. Inmuebles deberá pagar una indemnización de 21.381 euros al responsable del bar La Esperanza, ubicado en la calle San Jacinto de Triana, por los "daños y perjuicios" derivados de una medida cautelar impuesta en 2020. La medida permitía a la promotora del hotel, instalado en las plantas superiores del edificio que albergaba el bar, entrar en el local para llevar a cabo obras "urgentes" relacionadas con el proyecto del hotel, lo que llevó a la "paralización del negocio" del bar.
La empresa de reformas entregó el local al propietario del bar 10 meses más tarde de lo establecido en la medida cautelar
El auto emitido el 6 de julio por el Juzgado de Primera Instancia número 19 detalla que la indemnización se corresponde con los daños sufridos exclusivamente debido a la medida cautelar en cuestión. El dueño del bar, Jesús Noguera, había argumentado que tenía un contrato de arrendamiento vigente con vencimiento en marzo de 2023 para el local del bar, y que las obras del hotel habían causado una serie de molestias, como ruidos, golpes y escombros cayendo al patio interior del inmueble
La medida cautelar, impuesta en julio de 2020, ordenaba al responsable del bar permitir la entrada a la propiedad para las obras necesarias durante un plazo máximo de dos meses, previa caución de 35.000 euros, debido a que el edificio presentaba desperfectos y deficiencias que requerían reparaciones urgentes para garantizar su estabilidad.
Hora 14 Sevilla (18/07/2023)
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El juzgado destacó que la empresa Doble G. Inmuebles no cumplió con el plazo máximo de dos meses establecido para la medida cautelar y entregó el local al responsable del bar más de un año después, en diciembre de 2021.
En su auto el juzgado resuelve en su auto que "procede fijar los daños y perjuicios sufridos por el demandado (el responsable del bar), derivados de la paralización de su negocio durante el período de vigencia de la medida cautelar, en la suma de 21.381 euros", principalmente al no quedar acreditados 15.500 euros esgrimidos por supuestos daños al mobiliario del establecimiento.
"Estando prestada una caución por importe de 35.000 euros (por parte de la empresa), resulta una diferencia a favor de la parte solicitante de 13.619,58 euros, que es la que puede serle devuelta", concluye el juzgado.
