David de la Cruz: "Seremos una oposición leal y fiscalizadora"

Cádiz

El nuevo portavoz de Adelante en el Ayuntamiento de Cádiz, David de la Cruz, enarboló en su discurso de investidura del pleno de toma de posesión del nuevo alcalde, Bruno García, un mensaje de entendimiento, pero también de aviso para ser vigilante de lo que haga el nuevo gobierno. "Oposición leal y fiscalizadora", aseguró De la Cruz, para contrastar su papel con el que ha hecho el PP en los últimos ocho años "con denuncias e insultos".

Este ha sido su discurso íntegro:

"Permítanme que mis primeras palabras como concejal del Ayuntamiento de Cádiz sean de agradecimiento para el equipo de Gobierno saliente y para los concejales y concejalas de la corporación que finalizan su mandato. A mis compañeros y compañeras y en especial al anterior alcalde, José María González, no puedo más que dar las gracias por estos años de entrega, de compromiso, de sacrificio y de trabajo por los vecinos y vecinas de esta ciudad. Por luchar y pelear para que Cádiz sea más de todos, más bonita, más inclusiva y más diversa.

La historia y el tiempo juzgarán y pondrán a cada persona en su sitio y estoy convencido de que para ellos y ellas, y que para el anterior alcalde, queda reservado un lugar especial y señalado en los recuerdos y en la memoria colectiva. Cádiz es hoy otra ciudad. Donde se ha demostrado que el bastón de mando no es un coto privado, que cualquier ciudadano, indiferente de su origen, puede ocupar el sillón de Salvochea, y que se puede gobernar desde las mayorías para las mayorías. Con esa ilusión, y con ese ejemplo, trabajaremos desde hoy mismo para que estos últimos años no sean una anécdota, sino una inspiración en la que apoyarnos. Aprendiendo de los errores, defendiendo lo conquistado y aspirando a seguir abriendo la senda del progreso y la igualdad.

En segundo lugar, enhorabuena, y mis más sinceras felicitaciones tanto para Bruno García como para todo su equipo. Un agradecimiento de corazón, sin dobleces, ni mensajes velados. Una felicitación que va acompañada de mis mejores deseos. Creo que tras dos mandatos de una oposición instalada en la falta de respeto, en el insulto fácil y sin en el más mínimo afán de construcción, tenemos la oportunidad de demostrar que existe otra forma de hacer política, alejada de la crispación, con debates sanos, con diferencias y posicionamientos políticos opuestos, pero con el deseo de confrontar desde las ideas, desde el corazón y no desde el resentimiento y la inquina.

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Por nuestra parte, y como ya os hemos expresado, tanto nuestros teléfonos como nuestra disponibilidad serán accesibles para ayudaros en la difícil y tan hermosa tarea que tenéis. Y, especialmente, ofrecemos públicamente esa ayuda en este tiempo de transición, en estos primeros compases y en estas primeras semanas de cambio. Lo que está en juego está por encima de cualquier rivalidad política. Se trata del pueblo de Cádiz y esa es la prioridad. Por eso, y conscientes y conocedores de lo complicado que se hace el cambio de Gobierno cuando no existe ni el más mínimo apoyo de la anterior corporación, volvemos a mostrar públicamente un respaldo que ya se ha producido en diferentes reuniones y que se prolongará el tiempo que sea necesario. Bruno, concejales y concejalas del PP, una frase que quiero que os grabéis a fuego: En este nuevo contexto, podéis contar con nosotros y con nosotras.

En tercer lugar, gracias a la ciudad de Cádiz. Quienes creemos en el municipalismo. Quienes creemos en la política. Quienes estamos aquí sin más afán, más ambición, ni más deseo que mejorar la vida de la gente, ser concejal, ya sea en el Gobierno, o ya sea en la oposición, es un orgullo inmenso. En mi caso, en la primera vez que aspiro y ocupo un cargo público. Así que a los más de once mil trescientos gaditanos que depositaron su confianza en Adelante Izquierda Gaditana sólo os puedo asegurar una cosa: No os vamos a fallar. Os doy mi palabra.

Ni a ustedes ni a nadie. Ni a quienes nos votaron ni a quienes optaron por otra opción. Porque vamos a desarrollar una oposición leal. Leal a los derechos sociales, leal a los barrios, leal a quienes quieren vivir en su ciudad y no ser expulsados, leal al derecho al hogar, al agua, a los suministros básicos, a la vivienda pública y a las promociones que ya se están construyendo, leal a la cultura en cada rincón de Cádiz, leal a los eventos con carácter público, leal a una movilidad moderna y eficiente, leal a unas condiciones de trabajos dignas, leal a los servicios municipalizados y a los que deben serlo tras encadenar tantos años de precariedad. Leal a la juventud, a la infancia, a una salud mental asequible, leal al feminismo como único camino. Leal a nuestros coles, a nuestras plazas, a nuestros mayores, leales a quienes sufren el peor de los aislamientos, el aislamiento social. Leal a nuestra Memoria Democrática. Leal a nuestra historia, a nuestro presente y, sobre todo, leal a nuestro futuro.

Una oposición en la que no encontraras denuncias constantes en los tribunales, Bruno, te lo puedo asegurar, hasta 15, sufrió del Partido Popular quien te antecede en el cargo. Una oposición en la que no encontrarás el “no” sin argumentos, hasta en tres ocasiones votó tu partido en contra de un pliego de limpieza mientras exigía unas calles más limpias. Una oposición de la que nunca escucharás de mi boca calificativos como fascista, flojo, cacique, mentiroso o provocador. Términos que sí se utilizaron en el anterior mandato desde su portavocía y que deben ser ejemplo de cómo no se hace política. Que queden enterradas esas formas, ese clasismo y ese odio.

Una oposición leal y fiscalizadora, aunque se presentaran sin programa y eso complique la fiscalización, tomaremos como base que usted aseguró que gobernará para todos. Y a esa frase, que no dede convertirse en un lema vacío, nos aferraremos y exigiremos.

Porque Gobernar para todas y todos significa defender los servicios y los espacios públicos, que son de todos y de todas.

Porque Gobernar para todos significa desarrollar políticas valientes que palien una realidad como la emergencia climática y la sequía. Para todos y para todas las que están. Y también para quienes vienen.

Porque Gobernar para todos significa entender que antes que conseguir la Diputación, que antes que los intereses de partido, que antes incluso que nosotros y nosotras se encuentra la gente de esta ciudad. De una ciudad maravillosa, de una ciudad que amamos y de una ciudad que debe ser prioridad y en la que proteger, por encima de todo, a sus vecinos y vecinas más vulnerables. Personas sin hogar, gente en exclusión, migrantes, menores no acompañados, mujeres víctimas de violencias machistas componen el todos y todas también. Y si no avanzamos de la mano, si alguien se queda atrás, estamos retrocediendo. La libertad como los derechos deben ser colectivos. No acaban donde empiezan los otros, no. Se construyen y se respetan juntos.

Creemos en el diálogo, pero cuando el diálogo sereno no sea suficiente, ni se rinda, ni se conforme. Porque hay muchas promesas que le deben a Cádiz, porque hay muchas deudas pendientes y las buenas palabras a veces no bastan. Que te hiervan las injusticias, que te duelan, como nos duele, que Valcárcel, la ciudad de la Justicia, el nuevo hospital o las viviendas del Cerro del Moro sigan en el cajón del olvido. Y si no basta con pedirlo, que entonces arranquemos cada proyecto que no son ni tuyo, ni mío, ni de ningún partido, ni de ninguna administración, sino de Cádiz. Únicamente de Cádiz.

Bruno, legítimo alcalde, sé consciente cada día de la inmensa responsabilidad y del enorme privilegio que supone ostentar la Alcaldía de esta ciudad. Tan inmensa y tan enorme responsabilidad y privilegio que existieron alcaldes, como Manuel de la Pinta, que incluso antepusieron su vida y fueron fusilado por defender al gobierno democrático de Cádiz. Por eso, están permitidas las dudas, las inseguridades y hasta los errores. Siempre que desarrolles tu labor con honestidad. Aquí estaremos el resto de concejales para asegurarnos de que así sea. Porque la honradez no es negociable.

Escribió Fernando Quiñones, y ya concluyo, que “Se tarda mucho en saber que eres más una ciudad que una persona”. Y apoyándome en la frase del escritor queda la certeza de que somos y estamos hechos de Cádiz. Y lo somos porque la queremos, la sentimos y la soñamos. De ahí que todo lo bueno y todo lo malo que traiga esta etapa para la ciudad lo sentiré como algo propio. Como algo personal. Muchas gracias y mucha suerte."