Desarticulada en la provincia de Jaén una organización criminal dedicada al contrabando de tabaco
La Policía Nacional lo ha logrado gracias a una operación realizada conjuntamente con Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria y cuyo producto ilícito se hacía llegar a fábricas de tres provincias de Andalucía
Jaén
Desarticulada en la provincia de Jaén una organización criminal dedicada al contrabando de tabaco. La Policía Nacional lo ha logrado gracias a una operación realizada conjuntamente con Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria y cuyo producto ilícito se hacía llegar a fábricas de tres provincias de Andalucía. Fuentes policiales informan en un comunicado que “desviaban la mercancía de su destino inicial declarado” y la conducían “a una nave a las afueras de Bailén, para desde allí y bajo la apariencia legal de mercancía destinada al abono, hacerla llegar a diversas fábricas repartidas hasta en tres provincias andaluzas, donde se elaboraba en forma de picadura para poder ser fumada, la empaquetaban y la distribuían”.
Las investigaciones se han llevado a cabo por parte del Grupo de Estupefacientes de la Comisaría Local de Linares, la Brigada de Policía Judicial de Jaén y la Unidad Operativa de Vigilancia Aduanera de Córdoba perteneciente a la Agencia Tributaria. En la operación han sido detenidos 16 hombres de entre 20 y 55 años, todos españoles a excepción de uno de nacionalidad rumana, algunos con antecedentes por hechos similares. Se les acusa de delitos de contrabando y pertenencia a Organización Criminal y han sido puestos a disposición de la Autoridad Judicial.
La investigación se inicia en febrero cuando se informa “de un camión en tránsito por España cargado con más de 15.000 kilos de hoja de tabaco. Introducía grandes cantidades de tabaco en su modalidad strip de forma legal en España”. Se pudo comprobar que “la organización criminal operaba importando grandes cantidades de hoja de tabaco, para posteriormente elaborarla en forma de picadura con el fin de ser fumada, la empaquetaban y la distribuían. El único fin de la organización era el enriquecimiento económico mediante la comisión de delitos relativos al contrabando, por esa razón los miembros de la misma adoptaban medidas de seguridad que dificultaban la investigación policial”.
Utilizaban inhibidores de frecuencia para no ser detectados por la Policía y llegaban incluso a cambiar continuamente de empresa para evitar ser detectados y distraer a los investigadores. En todo momento esta organización criminal intentaba dar apariencia de legalidad. Para desviar el producto utilizaban camiones que iban hacia la citada nave industrial de Bailén y utilizaban otras fábricas con el fin de desviar la atención de los agentes. En esta nave camuflaban la hoja de tabaco como mercancía destinada al abono “mediante un nuevo etiquetado de las cajas”. La transportaban a distintas fábricas de Córdoba, Málaga y Sevilla donde se convertía en picadura de tabaco, se empaquetaba en bolsas termoselladas y se distribuía. El precio alcanzaba los 30 euros el kilogramo para el consumidor en venta directa.
En datos, se ha podido saber que están implicadas siete fábricas o puntos de tratamiento de tabaco en Andalucía, se han intervenido más de 2.500 kilos de picadura de tabaco, 24.700 kilos de hoja “strip” de tabaco lista para ser transformada en picadura, 10 máquinas picadoras de tabaco, 6 máquinas selladoras, 6 básculas de precisión, 2 máquinas envasadoras plásticas y 3 inhibidores de frecuencia. Unos 750.000 euros podría haber alcanzado en el mercado ilícito el tabaco incautado.