La Semana Santa de Granada ha vivido un comiendo histórico con tres días de grandes sorpresas por el notable incremento de participantes en los distintos cortejos nazarenos. Esas «vísperas» de los hasta ahora conocidos como «días grandes» anunciaban lo que ocurrió este Miércoles Santo: cinco estaciones de penitencia con subidas notables en los cortejos y una presentación en la calle espectacular, desde Los Gitanos a Los Estudiantes, desde El Nazareno a Las Penas y, desde luego por su llamativa presencia en cantidad y calidad, El Rosario. Granada está viviendo una Semana Santa histórica, como se asegura de forma generalizada, aunque pocos esperaban una explosión de visitantes como la vivida este miércoles, con todo el centro abarrotado, algo que se prolongó hasta la noche para acompañar a la hermandad de Los Gitanos por el Sacromonte, donde se llegaron a vivir escenas de pánico entre algunos de los asistentes por la gran afluencia de público. Si los primeros días demostraron que, en realidad, ya no existen días grandes porque días grandes son los nueve de la Semana Mayor de Granada, el Miércoles Santo, con la llegada del puente festivo, todo se desbordó y la ciudad se convirtió en un gran plató cofrade para la mejor película de la Semana Santa conocida. Para evitar la aglomeración de personas y cortejos en el barrio del Realejo, El Rosario, que sacó a un millar de personas a la calle con una imagen general espectacular, estrenó itinerario de ida hacia la Catedral por la Carrera de la Virgen. El Nazareno hizo lo mismo en el regreso por calle Mesones y Plaza del Carmen. En ambos casos, el resultado fue satisfactorio para el fin buscado y para la imagen ofrecida por el cortejo atravesando por esas nuevas calles.