Montañas Vacías, la ruta ciclista por la España más despoblada que ha conquistado a los estadounidenses
La ruta, de 700 kilómetros, tiene su epicentro en los Montes Universales con la Serranía de Cuenca, la Sierra de Albarracín en Teruel y la zona del Alto Tajo de Guadalajara
Cuenca
Montañas Vacías es la ruta ciclista que ha conquistado los corazones de los estadounidenses y que tiene su epicentro en los Montes Universales, en las provincias de Cuenca con la Serranía Conquense, Teruel con la Sierra de Albarracín y Guadalajara, con el Alto Tajo; una de las zonas más despobladas de Europa. La publicación de la ruta en la prestigiosa web bikepacking.com provocó su éxito, de hecho los lectores de la web la eligieron en 2020 como mejor ruta del año.
Detrás de este proyecto está únicamente Ernesto Pastor, natural de Sigüenza, que explica que Montañas Vacías “es un entramado de rutas para dar a conocer la situación demográfica de estos pueblos”. Se trata de un “experimento sin ánimo de lucro, sin coste y sin beneficio" que “podría traer cosas bonitas a estos pueblos”.
Entrevista con Ernesto Pastor
En 2016, empezó a darle vueltas a la idea. “Yo veía que cosas similares estaban funcionandoen otros puntos del planeta, los ciclistas de aventuras es lo que estaban demandado y este territorio daba mucho juego para hacer algo parecido”. No fue hasta la navidad de 2018 cuando decidió publicar el proyecto.
"Mandé la ruta que había creado a la web bikepacking.com pero no me la publicaban. Yo quería que me la publicasen porque era la web que yo usaba para planificar mis viajes”. Pasaron los meses y nada. Es por ello que decidió crear su propia web montañasvacías.com, al principio no tuvo demasiada aceptación. "Un día la ruta llegó a manos de unos de los editores de la web, la publicó y ahí explotó todo”.
La ruta es gratuita, Ernesto les proporciona el track a los interesados que la hacen con ayuda del GPS, es por ello que no sabe la cantidad de gente que la hace…y tampoco le interesa: “Entre 500 y mil personas al año hacen la ruta, pero no puedo saberlo a ciencia cierta, pero no necesito saberlo, me basta con recibir buenos comentarios de la gente de los pueblos, de las pequeñas tiendas de ultramarinos o del bar del pueblo. Sí es verdad que el efecto ha sido muy notable”.
Se trata de una ruta de 700 kilómetros, que se hace por encima de los 1,500 metros de altitud, por lo tanto es una ruta dura. “No es para todos los públicos, puedes pasar hasta 80 kilómetros sin pasar por un pueblo y no todos los ciclistas están preparados para eso, pero es bueno porque así no se masifica”.