Cierra una de las dos sucursales bancarias en Quero

Alcázar de San Juan

La sucursal de Liberbank de Quero cerrará en apenas 9 días de manera definitiva después de casi 50 años de servicio. Por tanto, este municipio de cerca de 1.000 habitantes solo tendrá una sucursal bancaria. El Ayuntamiento denuncia que la entidad bancaria ni siquiera lo ha confirmado previamente al consistorio y que se han enterado por los propios trabajadores de la oficina que se lo han ido comunicando a los clientes.

Fue en este momento cuando el alcalde, Rubén Torres, se puso en contacto con la entidad receptora que en este caso está situada en la localidad vecina de Villa de Don Fadrique, situada a 13km. Allí su encargada le comunicó que el cese sería efectivo el próximo 22 de abril. Señalan que no les han dado ningún tipo de explicación ni los motivos por los cuales echan el cierre en una población en la que un alto porcentaje de los vecinos están ya jubilados, "la brecha digital es esto, lo que les va a ocurrir a cientos de vecinos de la localidad cuando la sucursal cierre y se vean obligados a hacer uso de la tecnología", señalaba Torres.

Todo ello cuando el pasado mes de febrero el Gobierno Central y la banca firmaban el protocolo para el fomento de la inclusión financiera de mayores, por el que las entidades se comprometen a prestar un mejor servicio a las personas de edad avanzada, menos digitalizadas o más vulnerables. La iniciativa surge tras la repercusión que ha tenido la campaña promovida por Carlos Sanjuan 'Soy mayor, no idiota' en Valencia.

Hasta el momento son muchos los vecinos de Quero que ya han procedido a anular las cuentas que tenían en Liberbank y las han cambiado a la otra sucursal del municipio, Eurocaja Rural. Aunque todavía hay quienes confían en que abandonen esta idea o se llegue a un acuerdo pero el malestar es generalizado, "llevo 43 años trabajando en Quero y mi nómina está ahí desde el principio", explica una vecina. No es la única, otra de ellas dice que lo va a sufrir pero sobre todo por los mayores, "no es justo para ellos porque durante años han sido clientes y ahora los abandonan", decía.

Desde el Ayuntamiento plantean soluciones como por ejemplo que el banco abra un día a la semana o que exista la figura de un agente financiero, que son personas autónomas que realiza un servicio de asesoramiento relacionado con las finanzas y la inversión y que trabaja para una determinada entidad financiera. Algo que ya se ha puesto en marcha en otras localidades de la comarca como Camuñas o El Toboso.

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