Se alarga la agonía del Zamora CF, que cae ante el Real Unión (0-1)
Fue mejor, esta vez mostró intensidad y remate, pero la falta de acierto vuelve a condenar al equipo
Un momento del partido
Zamora
El Zamora CF está un paso más cerca del descenso, tras una nueva derrota en el Ruta de la Plata. Esta vez ante el Real Unión de Irún, en un partido que no mereció perder, pero volvió a mostrar la carencia que arrastra toda la temporada: sin goles no hay victorias.
En contra de la abulia mostrada ante Talavera y Unionistas, esta vez el cuadro de Yago Iglesias salió a por el partido: intensos, con garra y remate. El Zamora remató en los primeros 60 minutos de partido más de lo que lo había hecho en media temporada. Pero no sirvió. Un par de buenas intervenciones del portero irundarra, intercepciones de defensores, mala puntería y hasta un remate al larguero (del hoy debutante Assane a la salida de un córner) hicieron que los rojiblancos no marcaran.
Mientras, el Real Unión apenas se acercó a las inmediaciones de Pau Torres, aguantando como buenamente pudo el chaparrón local. Pero la primera que tuvo (minuto 59), la transformó en gol: Elosegui aparece solo al borde del área pequeña, y no perdona.
Quedaba media hora, Yago Iglesias movió el banquillo, pero todo fue ya inútil: los guipuzcoanos se crecieron, y al Zamora ya le faltaban piernas y fe para lograr la remontada. Otra derrota, otro paso al abismo.
En una jornada en la que el Bilbao Atletic empataba ante el Deportivo de la Coruña (pendiente de la reclamación de los gallegos por alineación indebida, en la que ganaba el Talavera en Majadahonda, y el Valladolid promesas en casa, ya son 11 puntos (más goalaverage) lo que separa al Zamora del milagro de la permanencia, un milagro en que ya casi nadie cree. No solo habría que superar al filial bilbaíno (o al Dux, en las mismas condiciones, 11 puntos y goalaverage en contra), también al Talavera, ya a 9 puntos, y al filial pucelano, ya 5 por encima de los rojiblancos.
Restan aún 7 jornadas. 21 puntos, sí, pero la opción de salvarse está demasiado lejos. Y el próximo viernes, a las 21 horas,, toca visitar a uno de los equipos más en forma: el Rácing de Ferrol.
